Miles de firmas ciudadanas contra la apropiación de la Mezquita por parte de la Iglesia
Hace ya ocho
años, en 2006, el Obispado de Córdoba inscribió la Mezquita a su nombre en el
Registro de la Propiedad. Apropiarse de este monumento considerado Patrimonio
Mundial le costó 30 euros gracias a dos artículos de la Ley Hipotecaria franquista
que daba categoría de administración pública a la Iglesia católica y que posibilitó
que, con la sola firma del obispo, fuera suficiente para registrar a nombre de
la Iglesia un bien público no registrado hasta la fecha. Ahora, una plataforma
ciudadana se ha levantado contra esta apropiación de la Mezquita –también catedral-
y recoge firmas on-line para que este monumento sea reconocido de titularidad
pública.
Esta
iniciativa popular está impulsada por la Plataforma Mezquita-Catedral de
Córdoba a través de Change.org y suma ya más de 34.000 firmas en http://www.change.org/mezquitacatedraldetodos
, una cifra que sube cada día desde que se ha impulsado esta petición, que
cuenta con importantes apoyos ámbitos culturales y académicos de Córdoba para
garantizar que “la Mezquita-Catedral de Córdoba siga siendo de todos”.
Así, en su
petición dirigida a la Unesco y a la Junta de Andalucía, se solicita la suma de
firmas ciudadanas para que ambas instituciones intervengan con el fin de
“evitar que el Obispado de Córdoba se apropie de la Mezquita-Catedral de
Córdoba“.
“Hace 30 años que la Mezquita-Catedral de
Córdoba fue declarada Patrimonio Mundial por la Unesco, no solo por su
extraordinaria riqueza y complejidad sino especialmente por tratarse de un
paradigma universal de concordia entre culturas“, explican en el texto firmado
ya por miles de ciudadanos.
Y argumentan: “Ante
los continuados intentos de apropiación jurídica, económica y simbólica por el
Obispado de Córdoba, incumpliendo gravemente los principios que inspiraron
dicho reconocimiento, desde la ciudadanía pedimos la intervención de las
administraciones públicas y de la Unesco con el fin de preservar del peligro
que corre su declaración como Patrimonio Mundial“.
El documento
propuesto para las firmas ciudadanas incluye cuatro reivindicaciones concretas
sobre la Mezquita. En primer lugar, “que deje de emplearse sólo el término
Catedral para referirse institucionalmente a todo el monumento“, como ha
impuesto la Iglesia en los últimos tiempos. También piden “un reconocimiento
jurídico de su titularidad pública“, puesto que ”la Mezquita-Catedral de
Córdoba es propiedad de la ciudadanía“. En tercer lugar solicitan ”una gestión
pública y transparente de la Mezquita-Catedral“ y, por último, reclaman ”la
redacción de un Código de Buenas Prácticas para evitar acciones que perjudiquen
tanto a la imagen como al significado del monumento“.
“La Mezquita es de los cordobeses, de los andaluces y de la humanidad”
“La Mezquita es de los cordobeses, de los andaluces y de la humanidad”
Desde el ámbito
académico, uno de los impulsores de la petición de esta plataforma ciudadana es
el profesor de Derecho Antonio Manuel Rodríguez, quien ha explicado en diversas
charlas en varios puntos de España la situación jurídica de la Mezquita. Y, en
ese sentido, señala que es importante que tanto la Unesco como la Junta de
Andalucía “tomen las medidas oportunas
ante el riesgo que corre su declaración como Patrimonio Mundial de la
Mezquita-Catedral de Córdoba“.
Este profesor viene denunciando la “usurpación”
por parte de la Iglesia de un bien público que, desde su punto de vista
jurídico, podría recuperarse para la ciudadanía si la Junta de Andalucía
reclamara al estado la titularidad pública del monumento registrado como
P atrimonio de la Humanidad con la denominación “mezquita” que la Iglesia
esconde bajo la nomenclatura de la catedral que también se levanta allí.
Rodríguez defiende que es posible
revocar el título de propiedad que ahora tiene la Iglesia en los diez primeros
años desde la inmatriculación del bien. A su juicio, todavía se está a tiempo
de devolver a la ciudadanía. Faltan dos años –el plazo se cumplirá en 2016- y
señala: “La Mezquita no es de la Iglesia católica, ”es de los cordobeses, de
los andaluces y de la humanidad“.