Las mujeres extranjeras sufren más violencia de género que las españolas, según la última encuesta de victimización realizada por el Centro de Investigaciones Sociológicas y el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. La jurista y criminóloga Lorena Antón García lo corrobora en su investigación sobre el impacto de la violencia contra las mujeres inmigrantes y la cobertura que ofrece el sistema penal español.
Las mujeres inmigrantes, salvo contadas excepciones, son invisibles en los discursos políticos sobre violencia de género en nuestro país, denuncia la investigadora, que acaba de defender una tesis al respecto. Esa invisibilidad “fue uno de los principales motivos que me impulsaron a estudiar esta temática”, afirma. Con los datos en la mano, Lorena Antón explica a eldiario.es/andalucia la situación de un colectivo sobre el que circulan prejuicios y falsos mitos.
¿Sufren más violencia de género las mujeres inmigrantes que las españolas?
Sí, esta es una de las principales conclusiones de mi investigación, que desmiente además la presunción de que las mujeres inmigrantes denuncian para conseguir la autorización de residencia.
¿Por qué se desmiente esta idea?
Las mujeres extranjeras denuncian tres veces más de lo que correspondería a su representación en la sociedad. En ocasiones, se ha querido explicar este hecho argumentando que con la denuncia pretenden regularizar su situación y obtener la autorización de residencia.
Sin embargo, teniendo en cuenta las encuestas de victimización realizadas en 2006 y 2011, así como las cifras sobre mujeres extranjeras muertas por violencia de género (en 2008 llegaron incluso a suponer el 47% del total de fallecidas), se puede concluir que esta sobrerrepresentación se debe a que efectivamente sufren más violencia de género y no a que hagan uso de la denuncia con fines utilitaristas.
¿Por qué tiene más probabilidad de convertirse en víctima una mujer de origen extranjero?
Existe una tendencia a asumir que la causa principal de la victimización de las mujeres extranjeras es 'su cultura de origen'. Sin embargo, los datos publicados por el Ministerio de Sanidad revelan que aproximadamente un 36% de las mujeres inmigrantes son maltratadas por hombres españoles. Esta información nos indica que las causas de la violencia de género en extranjeras pueden estar relacionadas con su situación estructural (situación económica, aislamiento social, barrera idiomática…) y no necesariamente con 'su cultura'.
¿De qué manera puede afectar su situación administrativa?
Supone una de las variables que afecta tanto a victimización como a la interposición de la denuncia de las mujeres inmigrantes, sobre todo, cuando su estancia en España es irregular o están reagrupadas por su pareja. La Ley de Extranjería puede ser utilizada por el agresor como un instrumento de control y a su vez puede representar una barrera para el acceso a la justicia.
¿Qué carencias podrían ser mejoradas en el sistema penal para atender a estas mujeres?
En mi opinión, se debe tener en cuenta no solo la situación de maltrato, sino también la situación administrativa y la condición de migrante o extranjera. Para visibilizar la violencia de género se han aprobado medidas de carácter universal que pretenden prevenirla. Esta estrategia puede ser útil para visibilizar esta problemática social pero puede tener consecuencias negativas para las mujeres que tienen necesidades particulares, como es el caso de las mujeres inmigrantes.
¿Podría darnos un ejemplo?
Si uno de los requisitos para acceder a las ayudas económicas es estar inscrito en el servicio público de empleo, las víctimas de violencia que se encuentren en situación de irregularidad no podrán ser beneficiarias de esta ayuda ya que no pueden inscribirse. Es cierto que en los últimos años se han aprobado algunas medidas que mejoran la situación de las víctimas de maltrato pero, bajo mi punto de vista, sigue primando la 'protección' de las fronteras del Estado sobre la protección de las víctimas inmigrantes.
¿Se podría hablar de discriminación por parte del sistema para este tipo de víctima?
No sé si es correcto hablar de 'discriminación', ya que desde un punto de vista jurídico este término tiene una connotación muy concreta pero, en cualquier caso, considero que existe una respuesta diferencial. Bajo mi punto de vista, la aplicación de la mayoría de las políticas públicas aprobadas, al dirigirse a todas las víctimas en general, sin atender a las circunstancias específicas de las victimas inmigrantes, puede dar lugar a situaciones en las que las estas mujeres no vean cubiertas sus necesidades. O incluso sean perjudicadas.
¿Cuáles son las principales causas que hacen que las mujeres inmigrantes no denuncien los casos de violencia de género?
El desconocimiento del funcionamiento del sistema penal o la desconfianza hacia el mismo, el aislamiento social, la dependencia económica o el miedo a las consecuencias de la denuncia (aumento de las dificultades económicas, ruptura familiar, detención o ingreso en prisión del agresor, etc). Estas barreras se acentúan en el caso de las mujeres inmigrantes, por ejemplo cuando identifican el funcionamiento del sistema penal español con el sistema de su país de origen, o cuando por su condición de inmigrantes tienen mayores dificultades para acceder a un puesto de trabajo.
Además, existen algunos obstáculos añadidos, como la barrera idiomática o el estatus administrativo que mencionábamos antes (principalmente cuando se encuentran en situación de reagrupación familiar o de irregularidad). Parece lógico que ante la posibilidad de ser expulsada del país una persona decida mantenerse al margen del sistema, aunque ello suponga no tener acceso a los recursos.
¿Se podría hablar de un perfil de mujer inmigrante maltratada?
En mi opinión no. La condición de inmigrante supone en ciertos casos un riesgo de sufrir violencia de género. El riesgo varía en función de circunstancias como la barrera idiomática, el tiempo de residencia en España, la situación administrativa, la red social, etc. Esto implica que las víctimas son muy variadas, es un grupo heterogéneo y creo que sería arriesgado hablar de un perfil de víctima.
¿Cree que la mujer inmigrante maltratada tiene visibilidad en los medios de comunicación?
Creo que en general las personas inmigrantes están invisibilizadas en los medios de comunicación, y cuando se presta atención a este colectivo se hace en un sentido negativo, vinculándolo con la inmigración irregular o con la delincuencia. Pienso que algo similar ocurre con las mujeres maltratadas que son inmigrantes. En raras ocasiones se hace referencia a su aislamiento social o a la incidencia de la Ley de Extranjería en su integración social, su acceso al mercado laboral y en su victimización. Sin embargo, se encuentran más noticias sobre el derecho de las víctimas a ayudas económicas o al permiso de residencia, lo cual, por otra parte, parece cuestionable.
¿Puede citarnos algún caso de iniciativa puesta en marcha en otro país que pueda servir de modelo para combatir el problema?
Realicé una parte de mi investigación en el Centro de Criminología de la Universidad de Oxford. Tuve la oportunidad de entrevistar a policías de la unidad de violencia de género y pude constatar que las prácticas son similares. Una de las diferencias más destacadas es que los miembros de este grupo realizan un seguimiento simultáneo de las víctimas y de los agresores, lo que, según su experiencia, permite prevenir futuros episodios de maltrato. Creo que se podría explorar esta posibilidad en España y ver si, efectivamente, tiene alguna incidencia en la prevención de este tipo de violencia.
¿Qué iniciativas desarrolladas por organizaciones (tanto gubernamentales como no gubernamentales) considera que deben ser destacadas como buenas prácticas?
En los últimos años ha habido un reconocimiento oficial de su mayor victimización, lo que ha favorecido la aprobación de diversas medidas positivas, como la elaboración de folletos de información o el acceso al teléfono de ayuda en varios idiomas. Además las dos últimas modificaciones de Ley de Extranjería, en 2009 y en 2011, ha mejorado la posición de las víctimas de violencia de género. La aprobación de estas reformas es positiva, sin duda, pero considero que para proteger a las víctimas se tendría que desvincular totalmente el acceso a los recursos de la interposición de la denuncia y la posibilidad de regularizar la situación administrativa de la obtención de una sentencia condenatoria o similar.
¿Qué otras áreas dentro del mismo ámbito considera que deberían ser investigadas?
Creo que es importante que un organismo externo evalúe las políticas públicas de los últimos años. Se han aprobado planes de prevención y tratamiento de la violencia de género, incluso uno específico para la población inmigrante, y diversos protocolos de actuación en este ámbito, y por el momento no han sido evaluados por una entidad externa, ajena al propio organismo que lo ha elaborado o implantado. También sería interesante poder estudiar si la respuesta de la policía y de los jueces puede variar en función de la nacionalidad o el origen étnico de las víctimas, tal y como se ha observado en otros países.