La provincia de Almería ha sido escenario de más de medio millar de producciones audiovisuales. La Alcazaba de la capital, el segundo monumento árabe más grande de Europa tras la Alhambra granadina, fue plató de una treintena de ellas desde la década de los sesenta. Entre ellas hay títulos premiados en Hollywood como Patton, series como Juego de Tronos y la norteamericana Rat Patrol, y éxitos de taquilla como Indiana Jones y la última cruzada.
La Alcazaba se ha convertido a lo largo de su historia cinematográfica en el norte de África, Malta, Argelia, Turquía, Roma, Francia o la imaginaria Dorne de Juego de tronos, que transformó el patio de la alberca de nenúfares en los Jardines del Agua de Lanza del Sol.
Famosos actores y grandes estrellas han pisado las milenarias piedras del palacio-fortaleza musulmán construido en el año 955 por Abderramán III. Desde julio de 2017 y hasta el próximo abril, los visitantes pueden disfrutar de una exposición de gran interés titulada La Alcazaba, patrimonio de cine, que cuenta con la organización de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, el Conjunto Monumental de La Alcazaba y el espacio de internet Almeriacine.
En la muestra se recrean los principales films que tienen este espacio como escenario y se puede disfrutar de objetos con historia. Dos ejemplos son el auténtico casco y la fusta que chasqueaba con furia George C. Scott en una mítica escena interpretando al General Patton, cuando éste recriminaba a un soldado estadounidense su falta de valor en combate, ya que permanecía recluido en la enfermería mientras su compañeros morían heroicamente o caían heridos ante los nazis.
La exposición está formada por decorados y atrezo de películas inolvidables, fotografías, carteles originales, vídeo y audio de las películas junto a las explicaciones y sabrosas anécdotas de los guías especializados del monumento.
Dado su éxito, la cita Alcazaba patrimonio de cine se ha prolongado hasta el 29 de abril, pero los itinerarios guiados por los lugares de los rodajes no acabarán entonces. El interés despertado va a permitir que las rutas de cine se institucionalicen, añadiendo un atractivo turístico más a la fortaleza y la ciudad.
El objetivo, cumplido ya, era dar valor añadido a este monumento. Además, recientemente se ha dado la protección de Bien de Interés Cultural (BIC) a las canteras califales, de donde se sacaron los materiales para su construcción.
El grupo Almeriacine es el responsable de esta iniciativa. Se trata de una asociación de investigación formada por locos del cine, enamorados de esta Almería tierra de cine. Ellos han organizado esta exposición, que en su umbral (en la Torre del Homenaje, donde se pudieron ver también a finales del siglo XX las históricas imágenes del Centro Andaluz de la Fotografía dentro del proyecto Imagina, con las mejores cámaras del mundo) recoge los 32 títulos, resumidos con sus correspondientes carteles originales a todo color.
Desde Cleopatra (1963) hasta Juego de tronos (2016), pasando por Patton (1970), Orgullo de estirpe (1971), Marco Antonio y Cleopatra (1972), El viento y el león (1975), Marchar o morir (1977), Conan, el bárbaro (1982), Indiana Jones y la última cruzada (1989) o Risen - Resucitado (2016).
George C. Scott logró el Oscar por Patton, y aquí rodaron también Omar Sharif, Charlton Heston, Sean Connery, Candice Bergen, Max Von Sidow, Arnold Schwarzenegger, Harrison Ford, John Milius, Steven Spielberg y las reinas de Juego de tronos, con Emilia Clarke entre ellas, sin olvidar a Manolo Escobar o Mariano y Antonio Ozores, junto a Andrés Pajares, en un amplio abanico del panorama español. Más de uno de esta lista cuenta con su estrella en el Paseo de la Fama de la ciudad.
El desaparecido y laureado director artístico Gil Parrondo forma parte entre otros de los técnicos españoles de los equipos allí desplazados, como Emilio Ruiz del Río, José Salcedo o Julián Mateos, cuyos hijos han cedido numerosas piezas originales de la exposición.
También ha aportado materiales Contreras Construcciones Cinematográficas de Tabernas, como las cuatro columnas romanas coronadas por águilas imperiales que la película Resucitado (2016), junto a unas aldabas con forma de cabeza de león. Clavius levantó, a los pies de la alcazaba y el monumento del Sagrado Corazón, en el cerro de San Cristóbal, todo un campamento romano de la noche a la mañana.
Las piezas que ha prestado la familia de Julián Mateos son únicas. No en vano hablamos de uno de los mayores expertos y proveedores de atrezo del cine español y de las producciones extranjeras rodadas en España. Su material está compuesto por espadas que aparecen en Los cuatro mosqueteros (1974), El viento y el león (1975) o Conan, el bárbaro (1982), junto a un escudo de esta película de Schwarzenegger.
A Mateos también se debe un sarcófago dorado que se utilizó en Marchar o morir (1977), cuya secuencia con Max Von Sidow descolgándose por una cuerda desde las alturas se explica detalladamente en la visita, o la joya de la corona, el casco y la fusta que George C. Scott lució en Patton (1970). Son símbolos sin los que el personaje no hubiera logrado sin duda el Oscar.
“Emilio Ruiz del Río, conocido como el gran truquista, el mago de las miniaturas, el último artesano del cine, construyó unas espectaculares maquetas para Conan, el bárbaro. Al colocar la cámara de la manera correcta, cambiaban la visión panorámica de la Alcazaba con gigantescas construcciones que no se encontraban ahí. Engañaba al ojo humano para hacer posible que el espectador proyectase sus sueños en la gran pantalla”, relatan los guías, expertos en la ruta.
“También encontramos alguna sorpresa en forma de fotografía inédita, como una de Harrison Ford en la actual calle Almanzor, una empinada cuesta con el monumento a los pies mientras rodaba Indiana Jones y la última cruzada. Esa calle, repleta de figurantes almerienses, por la que se accede al monumento, se convirtió en un zoco árabe”. Por el interior del recinto Schwarzenegger paseó entre la muchedumbre interpretando a Conan.
Queda el gran reto de todos los años, la pregunta siempre sin respuesta que se hacen sin cesar los almerienses. ¿Volverá Clint Eastwood donde triunfó con Sergio Leone? Se hacen todos los esfuerzos para conseguirlo, aunque parece que no hay muchas esperanzas. Sí se logró en su día con Patrick, el hijo de John Wayne.
Una de las últimas grandes visitas a Almería Tierra de Cine ha sido la de la italiana Milena Canonero, diseñadora de vestuario en Los hermanos Sister (Francia), rodada el pasado verano en Tabernas. Ha logrado cuatro Oscar por Carros de Fuego, María Antonieta, Gran Hotel Budapest y Barry Lyndon, siendo nominada en nueve ocasiones.
Canonero comenzó su carrera de la mano de Stanley Kubrick diseñando el mítico y rompedor vestuario de La naranja mecánica. Semanas después, el director Brian de Palma utilizaba la plaza de toros de la capital, entre otros escenarios, en un film con fondo de atentados yihadistas. Así es Almería, una ciudad de cine.