El pasado 7 de marzo la directora del distrito Puerto de la Torre de la ciudad de Málaga, Mercedes González, dio positivo en un control de alcoholemia. Dobló la tasa permitida con 0,54 miligramos por aire espirado. 24 horas después presentó su dimisión al alcalde, Francisco de la Torre (PP). Ahora, 18 días después, Mercedes González vuelve a tener trabajo en una administración pública. Será técnico del Grupo Popular de la Diputación de Málaga, también gobernada por el Partido Popular.
González, que fue concejal del Ayuntamiento de Málaga antes que directora de distrito, estará sólo tres semanas sin trabajo ya que se incorporará a su nuevo puesto el próximo lunes 1 de abril. Sin embargo, el nombramiento ha provocado las críticas de la oposición y un nuevo cruce de declaraciones entre PP y PSOE. El secretario de organización de los socialistas malagueños y portavoz en la Diputación, Francisco Conejo, ha denunciado “la pantomima de la dimisión y las declaraciones posteriores a ésta de Bendodo –presidente de la Diputación y del Partido Popular de Málaga- sobre la regeneración política, a la que poco contribuye esta colocación inmediata, que es un insulto a la inteligencia”. Conejo también ha anunciado que su formación exigirá explicaciones sobre este fichaje en el próximo pleno.
Mientras tanto en el PP, su portavoz en la Diputación y alcalde de Rincón de la Victoria, Francisco Salado, recuerda que el PSOE realiza contrataciones similares. En este sentido pone como ejemplo el del ex regidor del municipio de Fuente de Piedra, Cristóbal Fernández, imputado en su momento por un delito medio ambiental y actualmente trabajando en el Grupo Socialista de la institución.
Además, el cambio de trabajo de Mercedes González ha originado un pequeño seísmo de cambios en el organigrama del Ayuntamiento de Málaga y de la Diputación. El alcalde, Francisco de la Torre, anunciaba la reestructuración que afecta principalmente a los distritos y que desligó de la dimisión de la futura asesora de los populares en la institución supramunicipal. “Es muy normal”, precisó De la Torre en torno a estos cambios, además de concretar que “siempre es oportuno plantear nuevos retos para los mismos colaboradores”.
No es el primer caso
El fichaje de Mercedes González no es el primero que realiza la Diputación de un alto cargo que abandona el Consistorio malagueño por la puerta de atrás. En 2009, otro ex concejal, Manuel Marmolejo, renunció a su acta de edil después de vincularse la firma de 15 contratos menores con una empresa de un familiar. El hasta entonces concejal se incorporó pocos meses después al Grupo Popular en la Diputación, cuando el PP estaba todavía en la oposición. Marmolejo es actualmente el gerente del Consorcio Provincial de BomberosConsorcio Provincial de Bomberos.
Teresa López fue la penúltima contratación polémica antes de la de Mercedes González. López fue delegada municipal del Distrito Este en el pasado mandato municipal. Un controvertido reparto de subvenciones le situó en una delicada situación y el alcalde no le renovó la confianza en las últimas municipales. Unas semanas después también fue contratada por la Diputación Provincial para ocupar un puesto de confianza.
Pero la lista de trasvase de políticos del Ayuntamiento a la Diputación no termina aquí. El que fuese concejal de Movilidad hasta las pasadas municipales, Juan Ramón Casero, anunciaba meses antes de los comicios su intención de abandonar el ayuntamiento como edil. Ponía así fin a 24 años alternando distintos cargos públicos. Sin embargo, después de esas elecciones, se anunciaba su contratación como Director Técnico de Arquitectura, Urbanismo y Planeamiento. A estos fichajes se unen otros nombres como el del ex director del Área de Turismo municipal, Arturo Bernal, ahora gerente del Patronato de Turismo de la Costa del Sol, entidad también dependiente de Diputación.