Los partidos políticos con representación en el Parlamento andaluz llegaron este miércoles a un acuerdo sobre la composición de los miembros de la Mesa, órgano rector de la Cámara que presidirá el hasta hoy consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre. El diputado más longevo, que también ha presidido la Mesa de edad, ha jurado el cargo tras ser proclamado con los votos favorables de los 58 diputados del PP y la abstención del resto de grupos de la oposición, que han renunciado a presentar candidatos alternativos.
En su primer discurso, muy breve, Aguirre defendió “la capacidad de llegar a acuerdos desde opciones políticas diferentes por el bien de los ciudadanos”. “Debemos buscar soluciones, ser parte de la solución y no el problema, sobre todo ahora que ante una grave crisis económica. Espero que esta legislatura, tras cuatro años, se pueda calificar como la legislatura del diálogo y el acuerdo”, subrayó, para acto seguido estrechar al mano del presidente de la Junta en funciones, Juan Manuel Moreno.
En ese primer discurso, Aguirre citó al ex ministro de la UCD, Manuel Clavero Arévalo, a quien el PP ha denominado “padre de la Andalucía moderna”, único referente de la derecha en la lucha autonomista, aunque Clavero nunca formó parte del Parlamento andaluz.
El PP tenía garantizado el control de dicho órgano gracias a la mayoría absoluta que obtuvo en las pasadas elecciones andaluzas, le correspondían cinco de los siete miembros de la Mesa, pero finalmente ha decidido ceder un sillón a Vox, sin perder por ello la mayoría absoluta. El acuerdo alcanzado, según informan fuentes del PP andaluz, es un reparto en el que los populares tendrán cuatro miembros en el órgano rector de la Cámara (el presidente, la vicepresidencia primera y dos secretarías), el PSOE mantiene los dos a los que aspiraba por el peso proporcional de sus diputados (30), que serán la vicepresidencia segunda y una secretaría; Vox ostentará la vicepresidencia tercera y para dar cabida a Por Andalucía se ampliará la Mesa con una vocalía con voz pero sin voto.
Los cuatro miembros del PP son Aguirre (presidente), la diputada por Cádiz Ana Mestre (vicepresidenta primera), el diputado por Huelva Manuel Andrés González, que repite como secretario -único con experiencia en la Mesa- y el parlamentario de Málaga José Ramón Carmona. Moreno ha comparecido esta mañana con sus 58 diputados y ha anunciado estos nombres junto con el del portavoz de su grupo, que será el veterano diputado por Sevilla Toni Martín.
Los dos miembros del PSOE serán Irene García y Noel López. La vicepresidenta tercera será ocupada por la parlamentaria de Vox por Almería, Mercedes Rodríguez Tamayo. La primera reunión de la Mesa, que tendrá lugar este viernes, debe decidir sobre la incorporación de la diputada de Por Andalucía Alejandra Durán -de la directiva de Podemos- que previsiblemente ocupará una vocalía sin voto para cumplir con el reglamento de la Cámara, que establece en su artículo 36 que todos los grupos deben estar representados en este órgano.
Así arranca la XII legislatura en el Parlamento andaluz en su sesión constitutiva, cuando los 109 diputados han jurado o prometido el cargo, uno a uno, con la mano sobre la Constitución española. Primero se ha creado la Mesa de Edad, con los dos diputados más jóvenes -Montserrat Paz (PP) José Manuel Jurado (Por Andalucía) y el propio Aguirre, que mantendrá el sillón número uno de la presidencia el resto de la legislatura. Es la primera vez en 40 años que el PP ocupa este puesto, después de siete presidentes de la Cámara socialistas, uno de IU (Diego Valderas) y Marta Bosquet de Ciudadanos, en la pasada legislatura.
Las competencias de la Consejería de Salud las asumirá temporalmente el portavoz y consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, hasta la toma de posesión del nuevo Gobierno de Moreno, que será anunciado el 25 de julio, día en el que los nuevos miembros del gabinete jurarán o prometerán su cargo. El primer Consejo de Gobierno se celebrará previsiblemente el miércoles 27 de julio.
Los días 20 y 21 de julio será el debate de investidura, que Moreno tiene garantizada gracias a una mayoría absoluta de 58 diputados. Su toma de posesión se ha pasado del viernes 22 al sábado 23 de julio para evitar problemas de agenda del Rey Felipe VI, que debe recibir a Moreno en el Palacio de la Zarzuela para firmar su nombramiento, informan fuentes del Gobierno andaluz. Al acto está prevista la asistencia del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y de algunos presidentes autonómicos del partido.
Moreno quería evitar el inicio de la legislatura con una lectura política en la que el PP regala uno de sus puestos en la Mesa de la Cámara a la extrema derecha. La secretaria general del partido, Dolores López, trató de que los socialistas hicieran el mismo “gesto de generosidad” cediendo uno de sus sillones a la coalición Por Andalucía, para así equilibrar los movimientos. Pero, sobre todo, para que el PSOE de Juan Espadas no retomase la cantinela del tándem PP-Vox desde el inicio de la legislatura. “Haremos la lectura política que tengamos que hacer”, respondió el líder socialista este miércoles, cuando le preguntaron si su partido criticaría la cesión del PP a Vox pese a su renuencia a prescindir de uno de sus dos sillones en el marco de un acuerdo con todos los grupos.
El presidente andaluz en funciones ha enmarcado esa cesión a Vox dentro del “espíritu de generosidad” con el que un PP con mayoría absoluta quiere comportarse en esta legislatura “desde el minuto uno”. Al ser preguntado por si había negociado alguna contrapartida con la ultraderecha a cambio de ese sillón -en referencia al reparto de puestos en la renovación de los órganos de extracción parlamentaria, sobre todo el Consejo de Administración de la RTVA y el Consejo Audiovisual-, Moreno lo ha negado argumentando que sus diputados y los de Vox no alcanzan la mayoría de tres quintos de la Cámara exigibles para renovar dichos órganos. En realidad, el PP con sus 58 escaños y Vox con sus 14 sí rebasan esa mayoría, como ha reconocido posteriormente el equipo del presidente.
Al margen de la lectura política de cada partido, la composición de la Mesa de la Cámara es la más lógica de todos los escenarios posibles, porque viene determinada por una doctrina del Tribunal Constitucional, precisamente a resultas de la denuncia de una diputada del PP, la hoy consejera de Cultura en funciones, Patricia del Pozo, hace dos legislaturas. Entonces la situación era parecida a la de ahora, pero a la inversa. El PSOE ostentaba una mayoría absoluta en el órgano de dirección de la Cámara, y llegó a un acuerdo con IU para garantizarle un puesto en la Mesa a costa de quitárselo al PP. Los populares quedaron infrarrepresentados, con un solo miembro, igual que IU, pese a tener el triple de diputados.
La damnificada fue la elegida por el PP para ocupar ese puesto -Patricia del Pozo-, que recurrió la decisión al Constitucional alegando que se habían vulnerado sus derechos de representación política. El lío deviene de la complejidad de ajustar la representación de todos los grupos en la Mesa en función de la proporción de sus diputados con el reglamento de la Cámara, que dice claramente que todos deben contar con representación en dicho órgano. El Alto Tribunal dio la razón a Del Pozo y obligó al Parlamento andaluz a modificar la composición de la Mesa a mitad de legislatura, devolviendo a la diputada del PP a este órgano y habilitando una vocalía con voz pero sin voto para el parlamentario de IU José Antonio Castro, que hasta entonces había ocupado su lugar.
Ese precedente jurídico ha sido determinante a la hora de llegar a un acuerdo para esta legislatura. El PSOE, con 30 diputados, no podía quedarse con los mismos miembros en la Mesa que Vox (14 escaños) o que Por Andalucía (cinco). Los populares lo sabían, de modo que finalmente la única incógnita era saber si cedían o no uno de sus cinco sillones a la ultraderecha o, por el contrario, habilitaban dos vocalías en vez de una, para dar cabida a Vox y a Por Andalucía. La alternativa solo pasaba por que los socialistas, voluntariamente, hubieran renunciado a uno de sus sillones, algo que Espadas descartó de plano.
Ángeles Férriz repite como portavoz del grupo socialista, que presidirá Espadas. Inma Nieto será la portavoz de la coalición Por Andalucía, con el diputado y candidato de Podemos José Antonio Delgado como adjunto. En Vox será el parlamentario Rodrigo Alonso quien ejerza de presidente de grupo y Olona asume la portavocía. En Adelante Andalucía, que se constituirá como grupo mixto, será la líder de la coalición, Teresa Rodríguez, quien dé la réplica al presidente andaluz en las sesiones de control.
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