El Partido Popular vuelve a tener en sus manos la Alcaldía de Córdoba cuatro años después. Pese a perder votos y concejales con respecto a 2015, la candidatura encabezada por José María Bellido ha sido la ganadora el 26M en la capital cordobesa y marcará el nuevo gobierno municipal gracias a la mayoría de la suma del bloque de las derechas, a imagen y semejanza de la fórmula con la que se hizo con el Gobierno andaluz.
Con nueve concejales, el PP se apoyará presumiblemente en Ciudadanos, que pasa de dos a cinco concejales y ya en la noche electoral daba por seguro que formará parte del Gobierno municipal. Para la mayoría absoluta (15 o más), sin embargo, será necesario el apoyo de Vox -ya sea desde dentro del Gobierno o desde la oposición con un pacto de investidura como en la Junta-. Con los dos concejales obtenidos y pese a la pérdida de votos con respecto a las elecciones generales y andaluzas, Vox se convierte en clave para lograr que la Alcaldía de Córdoba pase de la izquierda a la derecha. Tras conocer los resultados, el partido de extrema derecha reafirmaba su idea de “echar a socialistas y comunistas” del Gobierno local.
La izquierda pierde el Gobierno
Y es que, enfrente, a los partidos que han conformado el actual ejecutivo municipal se les escapaba la posibilidad de reeditar la opción de un pacto de izquierdas. El PSOE sumaba más apoyos y un concejal más que en 2015, hasta lograr ocho, pero su socio de gobierno, Izquierda Unida, se dejaba por el camino un concejal quedándose en tres y obteniendo los peores resultados de su historia en la capital cordobesa, otrora el llamado Califato Rojo con Julio Anguita.
Además, tras la desaparición de la que fue tercera fuerza en Capitulares el pasado mandato –Ganemos- por decisión judicial ante una lista fantasma con el mismo nombre que no ha logrado representación, la entrada en solitario de Podemos con su marca no ha sido suficiente para sumar: ha obtenido dos concejales, con lo que la suma de PSOE, IU y el partido morado se quedaba lejos de la mayoría necesaria.
Para estos próximos días –que en Córdoba se vivirán con la Feria de Mayo de por medio-, quedará la negociación y los pactos hasta llegar a la constitución del próximo Ayuntamiento el 15 de junio. Las intenciones de los tres partidos de la derecha han quedado claras en la noche electoral a la hora de sumar para un nuevo gobierno de este cariz, sin atisbar la posibilidad de que Ciudadanos pudiera girar su apoyo al PSOE y buscar un posible gobierno en minoría con la abstención de IU.
Cuatro años después, el que fuera delfín del anterior alcalde del PP en Córdoba, José Antonio Nieto, logra de nuevo el bastón de mando para los populares con unos resultados a la baja, pero con la fortaleza de los pactos que aleja definitivamente los años de las mayorías absolutas en Capitulares.