MANIFIESTO HUELGA FEMINISTA 8M 2020
AQUÍ ESTAMOS COMPAÑERAS, JUNTAS. Un nuevo 8 de marzo, y volvemos a ocupar las calles, después de largas jornadas de autoorganizacion feminista, para hacer visibles nuestros trabajos, nuestras demandas y nuestros cuerpos. Para seguir reivindicando la necesidad de otro modelo social que coloque la vida en el centro, y conseguir que todas y todos tengamos vidas dignas de ser vividas. Que el buen vivir no sea a costa del mal vivir de otras personas, de otros lugares del planeta o del medioambiente, en el reconocimiento de un ecosistema finito y de la existencia de un reparto radicalmente desigual de la riqueza.
Con la fuerza colectiva seguimos demostrando que si paramos nosotras se para el mundo, que somos miles y millones las mujeres dispuestas a conseguirlo y vamos a por todas.
Se trata de una Huelga Feminista y por tanto trasciende la figura tradicional de huelga laboral al reivindicar las diferentes desigualdades que atravesamos las mujeres en todos los espacios de la vida: en la faceta laboral, pero también en la parcela doméstica y de los cuidados, que se corresponde con una ingente cantidad de trabajo feminizado, precarizado e invisibilizado, también en la educación, en la participación ciudadana y política…
Queremos denunciar que nos encontramos en un momento de emergencia feminista, porque nos están asesinando, más de 1000 mujeres han sido asesinadas por violencia de género en los últimos 15 años, y en lo que va de año 2020 son ya doce mujeres, sólo contabilizando los datos oficiales y por tanto los perpetrados por sus parejas y exparejas. Exigimos una modificación normativa que amplíe la definición de violencias machistas a todas las que sufrimos las mujeres, cis o trans, por el simple hecho de ser mujeres, o ser personas con identidades trans o con identidades no binarias.
Se calcula que violan o agreden sexualmente a una mujer cada 5 horas. Por lo que no estamos ante agresiones puntuales sino ante episodios cotidianos de violencia machista. Ante este problema estructural, que no es individual sino colectivo, seguimos construyendo espacios de seguridad, cercanía, empatía y sororidad, para reflexionar conjuntamente y dar respuesta a estos actos de violencia patriarcal.
Luchamos por un sistema en el que exista una corresponsabilidad de los cuidados entre hombres, mujeres y toda la sociedad, porque sin cuidados no hay vida. Y por tanto esta labor debe revalorizarse y si sale al mercado laboral dignificarse y equipararse al resto de trabajos. Por ello reivindicamos juntas condiciones dignas de las Kellys, de las trabajadoras de ayuda a domicilio, la equiparación en el régimen general de la seguridad social de las empleadas de hogar, que con condiciones precarias y bajos salarios, están resolviendo las necesidades de atención y cuidados de una parte importante de la sociedad ante el desmantelamiento de los servicios públicos y el sistema de atención a la dependencia. El sistema económico colapsaría sin nuestro trabajo cotidiano de cuidado. Denunciamos que el régimen de trabajo interno está expuesto a todo tipo de abusos frente a los que no hay protección por parte del Estado.
Del mismo modo luchamos por la dignificación de la vida y los apoyos que recibimos las personas con diversidad funcional. Reclamamos recursos que nos permitan controlar nuestras propias vidas, incluidas en la comunidad, como la asistencia personal autogestionada. Basta ya de segregarnos en instituciones o de abocarnos a recibir servicios asistencialistas, insuficientes y que, además, perpetúan la precariedad laboral de las trabajadoras. Para que todas las personas diversas podamos vivir en un entorno inclusivo y respetuoso con las diferencias, que forman parte de la condición humana. Por una Sevilla y un mundo accesible para todas y sin barreras de ningún tipo.
Para que exista una justicia alejada de lógicas y parámetros patriarcales, que llevan a considerar que las situaciones de acoso y agresiones sexuales son normales en ambientes de fiesta y de jolgorio, que revictimiza y culpabiliza a las víctimas de violencia machista, y no establece mecanismos que aseguren una adecuada protección, reparación y justicia real, en muchas ocasiones después de años de maltrato. Porque el sexo sin consentimiento SIEMPRE es violación.
Para que las mujeres seamos dueñas de nuestros cuerpos, nuestros deseos y nuestras decisiones. Para que el aborto esté fuera del Código Penal y se reconozca como un derecho de las mujeres y personas con capacidad de gestar a decidir sobre su cuerpo y su maternidad.
Para que las lesbianas, bisexuales, trans y otras personas disidentes sexuales dejemos de sufrir agresiones y múltiples violencias y podamos expresar libremente nuestra sexualidad e identidad o expresión de género.
Por una educación pública, gratuita, universal e inclusiva, en la que se establezca una asignatura de educación afectiva sexual que incluya las diversidades sexuales sin estereotipos, distintas identidades de género, los diferentes tipos de familia y de vida, así como contribuya a poner en valor la riqueza de la diversidad humana de todo tipo. Por eso decimos NO al veto parental.
Para romper con las fronteras, el racismo y la xenofobia que nos atraviesa y recorre toda la sociedad, nos declaramos insumisas con las políticas económicas y de extranjería que sostienen los CIEs, las vallas y las deportaciones de vidas.
Cabalgamos a hombros de las gigantas que nos precedieron, sufragistas, republicanas que defendieron con sangre la libertad y la democracia, activistas antifascistas que lucharon valientes en la Guerra Civil española, compañeras que lucharon denodadamente en las luchas antirracistas, contra el colonialismo y el imperialismo, por nuestra libertad personal y sexual, contra todo tipo de violencias machistas, todas ellas están aquí y siempre con nosotras, su ejemplo nos marcó el camino y aquí y ahora seguimos en la lucha por una revolución que será ecofeminista antirracista y anticolonial.
A la Huelga Feminista compañeras, a la Revuelta y a la lucha todos los días del año!!
ASAMBLEA FEMINISTA UNITARIA ABIERTA DE SEVILLA