¿Cómo será? Inicialmente, la propuesta es que nazca como ente público de crédito de Andalucía, orientado a conceder préstamos a las empresas, especialmente a las pymes que son las que sostienen el tejido productivo de la región. Los autónomos y las cooperativas y demás entidades de economía social son también su objetivo. No servirá para facilitar políticas redistribuidas ni fiscales. Cuando tenga ficha bancaria pasaría a ser un banco público, con la denominación comercial que se considere. En el futuro no se descarta que sea un banco público universal, es decir, para dar préstamos también a las personas físicas.
¿Qué margen legal hay para hacerlo? Se desarrollará a partir del artículo 158 del Estatuto de Autonomía, que obliga a la Junta de Andalucía a establecer los mecanismos financieros necesarios para favorecer la generación de riqueza.
¿Con qué instrumentos financieros cuenta ya la Junta de Andalucía? Por un lado, los fondos carentes de personalidad jurídica (con 14 tipos: para pymes agroalimentarias, para la internacionalización de la economía andaluza, para el desarrollo empresarial, para el fomento y la promoción del trabajo autónomo...). Y por otro, las sociedades de garantías recíprocas, con dos: Suraval y Avalunion, para Andalucía occidental y oriental, respectivamente. En total, unos 1.500 millones de euros.
¿Qué naturaleza jurídica tendrá? Nacerá como una empresa pública con forma de sociedad anónima, cuya titularidad ostentará la Junta de Andalucía. Será constituida mediante ley.
¿Cuánto puede tardar la ficha bancaria? Según el Real Decreto 1245/1995, la solicitud deberá resolverse en los seis meses siguientes a la recepción en el Banco de España. Los requisitos para ser una entidad bancaria vienen en dicha norma, y entre otras cosas exige un depósito en metálico en el Banco de España equivalente al 20% del capital social mínimo, establecido en 18 millones de euros. Una vez autorizada la creación del banco, hay un año para registrarlo.
¿Cuáles serán sus competencias? Gestión de fondos reembolsables, coordinación del sistema de garantías recíprocas y control de los fondos de capital riesgo en los que participe la Junta de Andalucía.
¿Cómo se controlará? Tendrá su propio consejo de administración. Se propone una dirección general nombrada por el Parlamento de Andalucía, que a su vez tendrá una comisión de comisión de control para hacerle seguimiento.
¿Qué plazos se manejan? En febrero de 2014 pasa el dictamen por la Comisión de Hacienda y Administración Pública. Se pretende que el Consejo de Gobierno apruebe el proyecto de ley para su puesta en marcha a mediados del próximo año y luego pasaría por el pleno del Parlamento de Andalucía. Tardaría otro año en estar plenamente operativo -2015 en el mejor de los casos- y entre uno y dos más para comenzar su transición hacia banco público.
¿Cuáles serán sus fuentes de financiación? Hasta que disponga de ficha bancaria, se sostendrá principalmente por el presupuesto de la Junta de Andalucía; los fondos reembolsables disponibles; los recursos que se obtengan por convenios con el Gobierno de la Nación, la Comisión Europea y otras instituciones financieras públicas nacionales e internacionales, o de entidades públicas o privadas, como por ejemplo el ICO o el Banco Europeo de Inversiones; y la emisión de títulos cuando los mercados lo permitan. Una vez obtenida la ficha bancaria puede capatar recursos de cualquier mercado financiero nacional e internacional, incluyendo el ahorro privado.
¿Cuántas oficinas debería tener? Inicialmente se sugiere una por provincia, e incluso alguna comarcal, además de una sede central. Se ve la posibilidad de incluir ventanillas en entidades públicas o en colaboración con organizaciones empresariales y de la economía social. También funcionaría online.