La abadesa de un convento de Sevilla denunció a una novicia de Kenia por dejar el monasterio y quedarse en España
Una joven de Kenia que llegó en 2010 a España para incorporarse como aspirante a monja de clausura en el convento de Santa María del Socorro de Sevilla te topó con el problema de que la abadesa del monasterio la denunció por ello y se quedó sin permiso de residencia. Según ha informado la cadena Ser, la joven ingresó en dicho convento de la orden Concepcionistas Franciscanas hasta que en 2011 la abadesa dio parte a la Delegación de Gobierno de Andalucía de que la mujer dejaba el convento porque no era apta para ese estilo de vida religiosa.
La joven, que tenía un permiso temporal de residencia ,se fue a vivir a Cádiz donde encontró un trabajo como empleada doméstica. Pero cuando quiso renovar el permiso se topó con que era imposible porque la denuncia de la monja había hecho que se le anulara. Gracias las gestiones de una abogada logró regularizar su situación y ahora reside en España y también trabaja.
La abadesa justifica su comportamiento en que se había comprometido a repatriarla si fuese necesario y que así lo hizo. En el escrito ante la Delegación de Gobierno, dice que le pagó un billete de repatriación a su país y que le dio dinero en efectivo. Y también denuncia la abadesa ante la autoridad que tiene constancia por el personal del aeropuerto de que no cogió el avión, que se quedó en España. Les alerta de que “entró por la puerta de embarque correspondiente, pero no accedió a su avión”, según la misma cadena