La secretaria general del PSOE-A y presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ha incidido este lunes en el mensaje que quiere mandar desde hace unas semanas: por el momento no está por tensar más la cuerda con el líder del partido, Pedro Sánchez, ni dificultando su intento de llegar a La Moncloa ni trabajando su relevo en la secretaría general. “Lo mejor que puede pasarle a España es que Pedro Sánchez pueda formar un gobierno estable que garantice la unidad del país y los derechos de los ciudadanos por encima de todo”, ha dicho durante su participación en los desayunos del Fórum Europa en Sevilla, donde no era la protagonista, sino el presidente del Parlamento de Andalucía Juan Pablo Durán, pero ha elegido el foro para reforzar esta idea públicamente.
En este contexto ha insistido en que ella está manteniendo “prudencia” -con pocas declaraciones sobre el tema en las últimas semanas- y “arrimando el hombro para ayudar” a que Pedro Sánchez pueda conseguirlo, pero igualmente ha considerado que tampoco hay que rasgarse las vestiduras si finalmente hay nuevas elecciones generales. En este sentido, ha comentado que “España está por encima del PSOE” y que los ciudadanos, “que nunca se equivocan ni son tontos”, tendrán “la última palabra en las urnas, si los que están al frente de los partidos en el Congreso de los Diputados no se ponen de acuerdo y no ponen los intereses del país por encima de los intereses de los partidos”. Para continuar: “No tenemos que sorprendernos ninguno por eso”.
Ella cree que sí tiene claro que otros intereses van después. “Para mí lo primero es Andalucía y España, y después el PSOE, y por tanto, creo que primero debe haber café para todo el mundo (…), segundo, garantizar la unidad del país y, en tercer lugar, los derechos, que son demasiados se han quedado en el camino”, ha enfatizado en respuesta a los que cuestionan sus prioridades.
Sobre los que insisten en que hay un sector del PSOE que abogaría por permitir el gobierno de Mariano Rajoy con una abstención, como han dicho el expresidente Felipe González o el presidente del partido en Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, entre otros, Susana Díaz ha dejado claro que no es su caso, bastante molesta como está con que la sitúen a la derecha del PSOE, especialmente desde Podemos. Ha dicho que se sonríe de que los que la mantuvieron “80 días” sin poder tomar posesión como presidenta de Andalucía, “porque iban de la mano de a los que hoy les preocupa tanto un pacto de radicales en España”, estén intentado que ella “quiera ver lo que no he querido ver”.
“Si Mariano Rajoy no es presidente es porque no le salen los números. Y si no le salen los números es porque perdió en Andalucía”, ha remarcado en este sentido y haciendo gala de la cuarta victoria consecutiva de los socialistas en Andalucía desde que ella lo lidera. Por eso, ha hecho hincapié varias veces en que, para Mariano Rajoy, el haber perdido las elecciones generales en Andalucía “le cerró las puertas para una investidura”. En esta línea, ha criticado que hay muchos “con capacidad o intuición para interpretar lo que piensan otros y les falta gallardía, valentía y coraje para decirle a Mariano Rajoy que se acabado ya, que es su hora y que después de tanto daño y de lo que estamos viendo, se tendría que haber marchado el primer día después del 20 de diciembre”.