Los trabajadores de emergencias de Andalucía protestan “por sevillanas”

La desesperación de los sanitarios de emergencias de Andalucía les ha llevado a protestar por sevillanas. Lo han hecho para solicitarle a la Junta que atienda sus demandas laborales. En concreto, un millar de manifestantes, llegados de toda la comunidad autónoma, se han dado cita por las calles de Sevilla para presionar al Ejecutivo regional y hacer buenas unas reivindicaciones que no son nuevas, pero que sí empiezan a ser urgentes. Exigen un trato igualitario entre trabajadores creando un único servicio en lugar de los dos que están actualmente entre el 061 y Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP). Un problema que bebe directamente de la extinción de las agencias sanitarias que llevó a cabo el Ejecutivo regional el pasado mes de enero. Fruto de la presión en las calles, Salud se ha abierto a negociar durante la mesa sectorial celebrada en paralelo a la movilización. El punto de partida es un decálogo presentado por los trabajadores de urgencias.

Las soluciones deben llegar cuanto antes, según denuncian los perjudicados, y la buena predisposición mostrada por Salud abre esa puerta para que se acabe con un sistema que, hasta esa fecha, ha hecho que haya dos dispositivos diferentes para tratar las urgencias de atención primaria. Por un lado, el SUAP y por otro el 061. Mientras que los trabajadores del primero pertenecen al SAS y se rigen por convenio público, los del 061 siguen siendo personal laboral con el convenio adaptado a su servicio, pese a haber sido absorbidos por Salud. Una dicotomía que tendría que haber terminado a comienzos de 2022 con la incorporación del 061 al sistema sanitario público, pero que lejos de hacerlo, sigue provocando un agravio comparativo que denuncian los profesionales del SUAP que este miércoles han mostrado su descontento en la capital de Andalucía con simbólicos bailes de sevillanas que han dejado patente el cansancio de unos profesionales que se sienten ninguneados por el Servicio Andaluz de Salud (SAS).

A todos los rincones

Con el apoyo explícito de todos los sindicatos que forman parte de la mesa sectorial (CCOO, UGT, CSIF, Sindicato Médico y SATSE), los 10.000 trabajadores que integran las emergencias de atención primaria, según cifras del gremio, piden que se les equipare con las condiciones laborales que tienen quienes forman parte del 061. No quieren más que ellos ni que se les empeore el convenio a sus homólogos sanitarios, sino que la integración se produzca de forma efectiva. Entre otros aspectos, recuerdan que el SUAP es el servicio que más urgencias atiende en toda la comunidad autónoma porque llega a todos los rincones, mientras que el 061 solo está en el 60% de las localidades andaluzas. Una realidad que no se traduce en el sueldo ni en el entorno de trabajo que tienen unos y otros. El personal del 061 puede llegar a percibir hasta 7.500 euros brutos anuales más que otro sanitario del SUAP que haga las mismas o más funciones. Tampoco tienen un sistema por el que se les añadan complementos por peligrosidad, días festivos, noches o turnos continuados.

Otro de los problemas que sufre el SUAP en comparación con el 061 es que el equipamiento es peor en las unidades móviles, al tiempo que la formación específica del personal deben costeársela de su propio bolsillo quienes forman parte del primero de los servicios. Cuestiones que se arrastran desde que en 1994 echó a andar el 061 para dar servicio a las capitales y grandes núcleos de población. Sin embargo, como explica Teresa Almagro, trabajadora del SUAP, la realidad es que “muchas veces hacemos más servicios nosotros que nuestros compañeros”. Algo que no se refleja en el imaginario colectivo puesto que para el ciudadano ha calado más el nombre de 061 que del SUAP. “A veces se alegran porque dicen que qué bien que haya llegado el 061 y nosotros tenemos que recordarles que no lo somos. Es molesto”.

Atención desigual para el ciudadano

Los médicos, celadores, enfermeros y técnicos que integran este servicio asumen que tras los problemas que ellos padecen, también ocurre que los ciudadanos acaban viéndose afectados. En función de la ubicación geográfica en la que se esté, puede ser que esté el 061 o el SUAP. Si solo hay SUAP, los medios de los que se disponen son peores, así como la situación laboral del personal resulta más estresante, lo que puede dar pie a errores. Una realidad que quieren que se acabe de una vez por todas a través de una equiparación de condiciones entre las dos unidades de emergencias sanitarias.

Por todo ello, llevan años reclamando que se revise el modelo que ha habido para mantener el servicio duplicado, pero con peores condiciones para quienes son personal del SAS. Un escenario que se ha recrudecido con la integración de las agencias sanitarias que ha dejado sin sentido que personal que forma parte del sistema sanitario público y ejerce las mismas funciones, cobre distinto y tenga peores medios para trabajar. “Hemos pedido reuniones con el SAS, pero de momento no ha habido avances”, explica Almagro. No obstante, tienen previsto solicitar un encuentro con todos los representantes sanitarios, entre los que se incluye la gerencia del 061. “A ver si tienen más empatía”.

No obstante, mientras se estaba produciendo la manifestación que ha recorrido las calles de Sevilla, se ha producido también una mesa sectorial en la que se ha tratado la situación del sistema de emergencias en atención primaria. Todos los sindicatos comparten la idea de que deben mejorarse las condiciones laborales del SUAP, pero lamentan que la Consejería de Salud siempre se haya opuesto a todas las propuestas que se han presentado en los últimos meses. Al respecto, desde el SAS dicen estar dispuestos a “acercar posturas” porque es el objetivo con el que trabajan. Fruto de ello, se ha aprobado un decálogo de medidas propuestas por los convocantes de la movilización para que en las próximas reuniones puedan salir adelante.