Gonzalo María Alba Beteré es el número 5 de Vox al Congreso de los Diputados por la provincia de Sevilla. Un juzgado le investigó en una de las piezas del caso Invercaria, la extinta empresa pública de inversión y capital riesgo de la Junta de Andalucía )donde declaró que le metió Juan Manuel González, sobrino de Felipe González) y ahora es fundador y director general de God Save My Swing, una marca de ropa “española (muy española), conservadora, y que encierra y transmite principios sociales cristianos”, como dice en su web y de la que presume el sobrino mayor del rey Felipe Juan Froilán.
Alba Beteré es un empresario sevillano aficionado al golf que presume de haber creado “la única marca con personalidad propia del mundo” a la que ha imbuido “una serie de principios y valores que son los míos propios”, esto es: española, conservadora, cristiana, provida (“el aborto como el mayor genocidio de la historia”) y antiindependentista (no vende sus prendas “a los que odian a nuestra Patria” como así lo refleja esta imagen captada de su perfil de Facebook donde lo argumenta de manera muy gráfica.
Muy activo en las redes, ha defendido recientemente el uso de armas para defensa personal, anunciado hace unos días por Santiago Abascal, estableciendo una comparativa. “El niño de 'Sólo en casa', Macauley Culkin, que defendió su casa de todo tipo de intentos de robo por parte de dos cacos desastrosos que acaban heridos, magullados, con la ropa destrozada, etc, habría sido culpable de tropecientos delitos de ”defensa desproporcionada“, si la película se hubiera ambientado en España, en vez de en USA”, escribió recientemente.
Operaciones “menores” para Invercaria
El candidato de Vox estuvo imputado por delitos de malversación de dinero público, falsificación y tráfico de influencias, si bien esa pieza del caso Invercaria se archivó. Alba fue director de coordinación de Invercaria y también secretario del consejo de administración de la iniciativa Ferias Internacionales Virtuales de Andalucía (FIVA). La inversión en FIVA fue un proyecto fallido de esta empresa pública de inversión que tiene varias piezas investigándose en los juzgados de Sevilla, y costó a las arcas públicas un total de 1,7 millones de euros.
Según el acta de su declaración como imputado el 23 de mayo de 2013, publicada por Europa Press, aseguró que entró a trabajar en Invercaria “a través” del sobrino de Felipe González y ex presidente de la sociedad, Juan María González, quien también lo “recondujo” al también expresidente de Invercaria Tomás Pérez-Sauquillo, quien tras dos entrevistas lo nombró director de coordinación.
El ahora candidato de Vox negó en el juzgado que efectuara “ninguna labor de análisis e informes financieros o jurídicos” para Invercaria, añadiendo que tenía poder para firmar en nombre de la empresa pública operaciones “menores” y que estuvo presente como secretario en dos sesiones del consejo de administración de FIVA, en concreto las del 9 de febrero y 14 de abril de 2007, tras lo que dejó de tener relación con esta iniciativa, cesando en su puesto de secretario el 27 de julio de 2007.