Años 30. Un esbelto y rubio extranjero aparece de la nada en mitad del Pirineo aragonés. Tras despeñarse por un risco, el joven no recuerda ni su nombre ni su lugar de procedencia. Mientras recupera la memoria, El Inglés, como le acaban apodando, es internado en el sanatorio mental de Valdellomar. Allí, el psiquiatra Pedro Martínez decide registrar con su cámara de aficionado el caso clínico este paciente al que supone alta alcurnia. Un peculiar 'Análisis de sangre azul' convertido en una película que, tras recoger excelentes críticas, se estrena en Zaragoza el próximo sábado 22 de abril, en Las Armas.
Muda, en blanco y negro, y con una cuidada estética, 'Análisis de sangre azul', si no fuera por los obligados logotipos institucionales, podría pasar por el auténtico testimonio de un médico obsesionado con su objeto de estudio. La zaragozana Blanca Torres, directora de la cinta junto a Gabriel Velázquez, reconoce que les tentó “mucho” lanzarlo a los cines sin advertir de que se trataba de una ficción. Con todo, “siempre hay algún despistado que cree que es un documental”.
“Queríamos recuperar el Pirineo como objeto romántico, en una época en la que las montañas todavía eran un lugar de relatos fantásticos, alejados, también geográficamente, de la civilización”, explica la realizadora. Un espacio “virginal” que “empieza a peligrar cuando llegan los primeros conquistadores: un médico, un extranjero y también una cámara”.
Para Orencio Boix, que firma el guión junto a Torres, 'Análisis de sangre azul' “habla sobre cierta idea de dominio”. “De alguna manera, las películas de Pedro Martínez le retratan a él mejor que a sus propios pacientes. Sus múltiples intentos de clasificarlo todo, su manera de mirar el paisaje, sus películas sobre insectos... Representa a los pacientes del sanatorio casi como un entomólogo, con esa preocupación de cierta psiquiatría por integrar el caso en un espacio bidimensional, cartesiano, intentando eliminar de la locura lo que tiene de movible, de desgarrado y de secreto”.
Esa fijación por abordar todo desde una perspectiva científica tiene una inesperada derivada, muy propia de aquella década. Y es que el doctor Martínez, hombre de ciencia en una especie de Hurdes del norte, ve en el espécimen aristócrata el instrumento perfecto para poner en práctica sus teorías evolutivas.
Un rodaje de época
Para acercarse lo más posible a aquel tiempo, y también al punto de vista de continúa fascinación del médico, el equipo de rodaje trató de grabar tal como se hacía en los años 30. “Buscamos incluso una cámara Keystone de la época, y la encontramos, pero ya no se hace película para ella, así que valoramos otras opciones como el Super-8”, relata Torres. 'Análisis de sangre azul' trata también de plasmar el valor antropológico de las filmaciones del doctor, por lo que en el metraje se ha recurrido a archivos familiares y al material del reconocido etnógrafo Eugenio Monesma.
El plantel de la película contribuye decisivamente a reforzar la atmósfera de realidad. Como protagonista actúa Anders Lindström, un modelo sueco cuyas proporciones y mirada azul transmiten una creíble sensación de inocencia y adanismo. Junto a él, en el papel de pacientes del sanatorio, participan los integrantes del grupo teatral Arcadia de Fundación Agustín Serrate, dedicada a la rehabilitación e integración de personas con salud mental.
El principal referente para abordar 'Análisis de sangre azul' fueron las fotografías y películas médicas de la época. Blanca Torres cita las instantáneas captadas por el neurólogo francés Jean-Martin Charcot, que retrataba a las histéricas del Hospital de la Salpêtrière, a lo que sumaron el visionado de algunas cintas rodadas en sanatorios americanos de la época y las películas del archivo del hospital psiquiátrico de San Juan de Dios.
Tras haber permanecido en las salas madrileñas durante un mes - “es algo verdaderamente sorprendente para una película muda y en blanco y negro, no me lo esperaba”, reconoce Torres-, y tras pasar por las pantallas de Huesca, 'Análisis de sangre azul' llega a Zaragoza. La proyección será el sábado 22 de abril, a las 12:00, en el Centro Artístico de Las Armas (Plaza Mariano de Cavia, 2), con entrada de 4 euros.