Podemos... pero Unidos

Quienes firmamos este artículo participamos hace ya dos años en la candidatura Claro Que Podemos al Consejo Ciudadano de  Podemos Aragón.

Esta candidatura estuvo formada por personas que pertenecíamos (y pertenecemos) a varias de las corrientes existentes en Podemos. También a tradiciones y generaciones distintas. Esa diversidad nunca fue un problema, ya que compartimos el objetivo de construir un Podemos fuerte, honesto, unido, sensato y que sirva para pelear por los derechos e intereses de la mayoría. 

Nos entristece profundamente la división absurda entre Pablistas y Errejonistas. Es obvio que en un partido de base amplia, que no es una secta de la extrema izquierda al estilo del Frente Popular de Judea sino un partido de masas, tiene que haber posiciones diferentes. Esto ocurre en todos los partidos grandes. Sin embargo, a nuestro entender las diferencias que se plantean no son tan grandes, y lo que es más importante: las alternativas no son excluyentes sino más bien complementarias.

 “Politizar el sufrimiento” o “Buscar a los que no están”

Está claro que para alcanzar la unidad popular necesitamos una base amplia y que debe albergar en su seno elementos sociales de carácter transversal y diverso.  Desde parados y desahuciados despolitizados a esas personas que como explicaba Errejón dicen “a mí me gusta lo que decís pero es que yo tengo unos ahorrillos”. Por eso iniciativas como Vamos, enfocada a movilizar a ese sector despolitizado y que es el que más está sufriendo la crisis, son importantes. Porque esa gente es necesaria para la transformación social, pero también es necesario que esas familias de clase media que a base de currar y ahorrar se han comprado un par de casas, nos vean como aquellos que pueden defender sus intereses frente a los abusos de las eléctricas o de la banca. Para explicarlo con ejemplos de actualidad, diremos que es necesario evitar los desahucios y acabar con la pobreza energética pero también acabar con la estafa en la tarifa de la luz que pagamos todos y con los abusos generales de las condiciones hipotecarias (clausulas suelo o gastos de constitución por ejemplo). Por lo tanto no existe contradicción real sino una simple cuestión de dónde ponemos el acento.

Calle o Parlamento

“Todos los derechos se han conseguido con la movilización, nada en los parlamentos” o “las protestas no valen para nada”, son letanías ambas tan repetidas como absurdas. Esta es otra de esas falsas dicotomías. Hay que hacer una labor útil en los parlamentos. Hechos como la reciente subida del SMI en España (aunque haya sido menos de lo necesario) o el que Fernández Díaz no presida una comisión en las Cortes, se deben básicamente a nuestra acción parlamentaria. Aquí en Aragón, gracias a nuestros diputados, hemos sido pioneros en el Estado en hacer una norma contra la pobreza energética. Y por descontado que los firmantes de este artículo creemos en la acción y la movilización como forma de hacer política. Hay sobrados ejemplos históricos de la utilidad de la movilización. Pero si hay algo todavía más evidente, es que la combinación de las dos, es decir, de acción parlamentaria y de movilización, es sin duda, lo que mejores resultados da. En realidad volvemos a ver que la dicotomía no es tal.

¿Cómo Sumar?

De este tema se habla mucho, pero en realidad es uno de los que menos discusión tiene, tanto Iglesias como Errejón están dispuestos a apoyarse en otras fuerzas, ya sea a través de las confluencias autonómicas, de la coalición con IU o de las ciudades del cambio. Sin embargo, los dos quieren preservar la estructura e independencia orgánicas de Podemos. Vuelve a no haber debate, ambos están de acuerdo.

La asamblea estatal de Podemos (Vista Alegre 2) debe trabajar por un documento de consenso que facilite la consolidación de un partido honesto, fuerte y unido que sirva para atraer a los que no están y para politizar a los de abajo, que agite el árbol en la calle y recoja las nueces (en forma de conquistas sociales) en el parlamento y que esté abierto a las confluencias pero manteniendo su identidad orgánica.  Creemos que es posible y necesario. Para la batalla que tenemos por delante, que es la de cambiar este país, no sobra absolutamente nadie y deseamos profundamente ver la escenificación de ese partido unido en Vista Alegre 2.

*Alfonso Alegre Val. Profesor y Economista. @alfonso_alegre. @alfonso_alegre

*José Luis Martínez “Negro”  Miembro de CCA de Podemos Aragón.

*Pedro Arrojo. Diputado de Podemos por Zaragoza en el Congreso. @PericoArrojo@PericoArrojo

Quienes firmamos este artículo participamos hace ya dos años en la candidatura Claro Que Podemos al Consejo Ciudadano de  Podemos Aragón.

Esta candidatura estuvo formada por personas que pertenecíamos (y pertenecemos) a varias de las corrientes existentes en Podemos. También a tradiciones y generaciones distintas. Esa diversidad nunca fue un problema, ya que compartimos el objetivo de construir un Podemos fuerte, honesto, unido, sensato y que sirva para pelear por los derechos e intereses de la mayoría.