La consejera de Sanidad señala que Aragón flexibilizará medidas “en los próximos días” y pasará a fase 1

La consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, ha manifestado que ante la buena evolución epidemiológica que reflejan los diferentes indicadores en cuanto a reducción de contagios y gravedad en la transmisión del coronavirus, la comunidad autónoma pasará “en los próximos días” de la actual fase de alerta 2 flexibilizada a una fase 1, que modulará medidas menos restrictivas que las contempladas en la ley.

En declaraciones a los medios de comunicación, con motivo de su visita al Hospital de Calatayud, Repollés ha remarcado la importancia de los indicadores relativos a la ocupación hospitalaria y de las Unidades de Cuidados Intensivos de pacientes con la COVID-19, y ha subrayado que en este último caso está por debajo del diez por ciento, con 19 personas en UCI.

La consejera ha contemplado la posibilidad de entrar en fase 1 en los próximos días, aunque la incidencia acumulada a siete y 14 días no se encuentre por debajo de los 25 y 50 casos por 100.000 habitantes, respectivamente, porque ha opinado que se han de analizar los indicadores “de forma cualitativa” y, en todo caso, el cambio se realizará “poniendo condiciones de seguridad”.

En estos momentos, ha dicho, la incidencia acumulada a siete días está en Aragón en los 39,3 casos por 100.000 habitantes, mientras que el número reproductivo básico y la positividad presentan cifras bajas.

La consejera ha sostenido que la ley autonómica de medidas contra la COVID-19 “ha sido una buena práctica, que nos ha protegido” y ha dado “cohesión, respaldo y certezas”, si bien ha  apuntado que puesto que las normas se elaboran en un momento determinado, durante su aplicación se han flexibilizado las medidas contempladas para cada fase.

Ha añadido, en este sentido, que, probablemente, “cuando pasemos a nivel 1, será más flexibilizado incluso de lo que aparece en la ley”, en cuanto a agrupación de personas y algunos horarios. Sobre los aforos, actualmente al 75 por ciento, ha apuntado que se mantendrán, salvo excepciones. “Ya no puedo adelantar nada más porque todavía estamos trabajando”, ha zanjado Repollés.

La consejera ha contado que el descenso de la incidencia está siendo lento y así seguirá, manteniendo las cifras actuales “durante muchas semanas”, para precisar que los casos se están dando de forma mayoritaria en el grupo de edad de 10 a 29 años, que es población no vacunada y que no enferma con gravedad, si bien ha dicho que hay que intentar “que no se infecten”.

También ha comentado que los días en que ha habido un mayor número de casos recientes se ha debido a brotes “en esta población joven”, algo que ha achacado a que tras un año “difícil”, ahora que la situación “está mejor”, se ha acabado el curso y llega el verano “es mucho más complejo intentar hacer cumplir las normas”.

No obstante, ha apelado a “extremar la precaución” porque el virus “está entre nosotros, se producen contagios y no podemos bajar la guardia”. Repollés ha enfatizado: “Podremos acabar con esto si somos correctos cada uno de nosotros en las medidas y, especialmente, la población que todavía no está vacunada”.