El presidente de Aragón, Javier Lambán, va a seguir impulsando “contra viento y marea” la candidatura de los Juegos Olímpicos 2030 y defendiendo que su organización se lleve a cabo a partes iguales entre Aragón y Cataluña. No le va a frenar la negativa catalana a compartir protagonismo, como tampoco las discrepancias con el proyecto olímpico de dos de sus socios en el cuatripartito que gobierna Aragón: Chunta Aragonesista y Podemos. Lejos de rendirse, Lambán saca pecho al reivindicar que la comunidad, por la calidad de las estaciones de esquí que hay en el territorio aragonés y por su amplia experiencia en la celebración de este tipo de eventos en la ciudad de Jaca, está “más acreditada que Cataluña” para organizar unos juegos de invierno.
“Si tuviéramos que competir Aragón y Cataluña frente a la otra, o si una tuviera que asumir el liderazgo, no tengo duda de que ganaría Aragón”, aseguró ayer el dirigente socialista ante el Parlamento aragonés que reabrió sus puertas tras el paréntesis navideño. Lambán pidió comparecer para explicar cuál es la situación en la que se encuentra la candidatura olímpica después de los últimos sucesos y cruces de declaraciones que han puesto en peligro la candidatura. El primer rifirrafe llegó en verano, cuando “pactamos una carta y el presidente de la Generalitat incumplió su compromiso y redactó la carta en términos distintos a los pactados conmigo y con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez”. La postura aragonesa recibió el respaldo del presidente del COE, Alejandro Blanco, y del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien en septiembre visitó Zaragoza para hablar de unos “Juegos de país” para 2030.
El incidente más sonado ha sido, sin duda, el protagonizado por Lambán hace unos días en Balaquer, cuando dejó colgado a su colega catalán, Pere Aragonés, por su negativa a compartir protagonismo en la organización de los juegos.
Así las cosas, el Gobierno central y los dos gobiernos autonómicos se han concedido un periodo de reflexión hasta que finalicen los Juegos Olímpicos de Pekín. Mientras tanto, prosigue sus trabajos la comisión técnica integrada por las tres administraciones, creada el 21 de diciembre y que ha mantenido varias reuniones.
58 de 67 diputados
El presidente aragonés constató ayer, tras oír a todos los grupos de la Cámara, que la candidatura cuenta con el respaldo de 58 de 67 diputados. PSOE, PAR, PP, Cs y Vox están de acuerdo con seguir adelante con el proyecto. No ocurre lo mismo con IU, que los rechaza, y tampoco sus socios de Gobierno, Podemos y CHA, que se oponen a los Juegos y que le echaron en cara falta de información. Esta situación “garantiza que la candidatura seguirá pase lo que pase en las próximas legislaturas”, constató el socialista.
Según desveló, el presupuesto de unos posibles Juegos sería de 1.400 millones de euros, de los que el COI aportaría 900 millones y el resto correría a cargo de patrocinadores privados. Los Juegos durarían 17 días y se disputarían 100 pruebas de 16 disciplinas. Participarían 3.000 deportistas de 100 países. Los paralímpicos durarían diez días. Se calcula que 1.920 millones de telespectadores seguirían los Juegos. “No se van a construir macro instalaciones. Estamos hablando de sostenibilidad, de oportunidad para empresas, de empleo y de mejora de comunicaciones viarias. Desde, el punto de vista del sentido común, es algo irrechazable”, aseguró.