Esta vez han decidido dar el paso. Vecinos de distintas ideologías se han unido y han formado una agrupación para gobernar sus ayuntamientos en varios municipios aragoneses. Su único propósito no entiende de partidismo. Quieren salvar su pueblo, y ahí están todos de acuerdo.
La movilización de la España vaciada se ha dejado notar también en estas elecciones locales, a las que concurren por primera vez agrupaciones que buscan un futuro para su pueblo. Así, en Loporzano (Huesca) se presenta 'Loporvenir', cuyo nombre ya aporta pistas sobre su intención política; en Bailo (Huesca), 'Por la ilusión, la imaginación y el impulso del medio rural', y en Aísa (Huesca), 'Por el Valle de Aísa'.
Llama la atención la diversidad en Asín (Zaragoza), donde se presentan cinco listas, entre ellas la Agrupación Independiente de Asín y la Agrupación de Electores Partido Asinense.
“Nos han dejado de la mano de dios”
Son municipios pequeños, de no más de 500 habitantes, ubicados en zonas alejadas de la capital aragonesa, donde se concentra el 50,8 % de la población de esta comunidad. Están en territorio despoblado, o, lo que es lo mismo, en territorio olvidado.
Así lo percibe al menos la representante de la agrupación 'Por la ilusión, la imaginación y el impulso por el medio rural', Rossana D'Angeli. Bailo es un pueblo de 279 habitantes, cuya población va en descenso. La escuela cerró hace seis años y recientemente lo han hecho las dos oficinas bancarias y la única tienda que todavía levantaba la persiana.
D'Angeli se queja de que todas las inversiones se hagan en Jaca y lamenta que los servicios básicos no lleguen al resto de municipios de la comarca.
“Nos han dejado de la mano de dios, porque no hay turismo, a pesar de ser una zona tan bonita como es el valle del Aragón”, asegura, y afirma que esta candidatura nació al calor de la manifestación de la España vaciada, a la que acudieron para hacerse oír.
“Hemos visto durante años que a los políticos, de cualquier color –porque aquí se han turnado PP y PSOE–, no les preocupaba el tema de la despoblación”, lamenta.
Por ello, han decido “tomar cartas en el asunto”, decir “alto y fuerte” que este pueblo “no se va a morir” y concurrir a las elecciones locales con una lista compuesta por personas con “gran formación” y de “distinta ideología”, entre las que se encuentran médicos, profesores o geólogos
Creen que desde el Ayuntamiento pueden presionar a la Administración, especialmente a la comarca y a la diputación, y promocionar el patrimonio natural de su territorio como atractivo turístico.
Plantean también hacer una consulta mensual a los ciudadanos para conocer sus necesidades, incluidas a las personas mayores que muchas veces no tienen forma de trasladarse a Jaca para ir al médico o, simplemente, a la peluquería.
Ahora lo hacen con un grupo de “blablacar Bailo”, donde los vecinos preguntan si alguno de los que se trasladan a diario a Jaca puede llevar en su coche a otro vecino. Pero no es justo, porque “pagamos los mismos impuestos y no tenemos nada”, recalca.
“La fibra óptica solo llega al centro del pueblo, no a las casas”
En Loporzano, los integrantes de la agrupación 'Loporvenir' también confían en las oportunidades del territorio. De este municipio dependen hasta 15 núcleos, algunos deshabitados.
Están convencidos de que se pueden hacer muchas cosas por “el bien del pueblo” y que hacerlas depende de la “voluntad política”. Quieren romper la “inercia” y cierta resignación que, opinan, se ha instalado durante décadas en estas localidades, y hacer las cosas de otra manera.
Loporvenir está integrado por personas jóvenes, algunas del pueblo, “de toda la vida”, y otras que han decidido iniciar su proyecto de vida allí.
“Hay gente que como yo venimos de fuera y que tenemos aquí unas expectativas para nuestro proyecto de vida que vamos a pelear”, apunta Jorge Luis Bail, quien fue diputado de Unidos Podemos por Huesca en el Congreso de los Diputados la pasada legislatura.
Pone un ejemplo. La fibra óptica solo llega hasta el centro del pueblo, no a las casas. “Esto fue por falta de comunicación y de iniciativa del Ayuntamiento”, explica. Ahora les interesa solucionar ese “desaguisado” para garantizar ese “porvenir” del que hablan. Su apuesta es hacer una alianza entre los sectores tradicionales de la zona y otros más novedosos, que requieren de estas nuevas tecnologías.
“No vale con decir 'no me gusta' lo que dicen o hacen”
Por su parte, la Agrupación de Electores del Valle de Aísa busca descentralizar la actuación del Ayuntamiento para que llegue a los núcleos más pequeños. De Aísa dependen Esposa, Sinués y Candanchú.
Hace años que tenían en mente formar una agrupación porque los partidos políticos que han gobernado hasta ahora no han conseguido “nada”, pero ha sido esta vez cuando han decidido dar el paso.
Para Fernando Lozano, el cabeza de lista de esta agrupación y arquitecto, que vive a caballo entre Esposa y Zaragoza, los vecinos comienzan ahora a concienciarse y, sobre todo, a “tomar parte activa”. “No vale con decir 'no me gusta' lo que dicen o hacen, pero yo me quedo en mi casa; hay que participar”, anima. Saben que son ellos los “únicos interesados” en que sus pueblos no mueran.