Los delitos contra la libertad sexual aumentan un 25 % en Aragón

Resulta complicado discernir si el aumento de los delitos contra las mujeres obedece a que estos hechos se denuncian más que antes o a un repunte de las agresiones. Pero lo cierto es que en Aragón han aumentado, y además de una forma significativa.

Según los datos del Ministerio de Interior, los delitos contra la libertad sexual aumentaron un 25,5 % en 2018, al pasar de 247 a 344. Este incremento se repite también en las agresiones con penetración, que subieron un 22,2 %. El informe, que registra las infracciones penales en las localidades con más de 30.000 habitantes, habla también del resto de hechos delictivos de tipo sexual y, del mismo modo, se da un ascenso importante: un 25,9 % más que al año anterior.

Por provincias, los aumentos más significativos se concentran en la capital aragonesa, donde las agresiones con penetración ascendieron un 44 %. En 2018 se registraron 23 delitos de esta naturaleza en Zaragoza, frente a los 16 del año anterior. En la provincia de Huesca, se produjeron dos agresiones de este tipo, mientras que en Teruel no se denunció ninguna.

Tanto en la provincia de Huesca como en Teruel, los delitos contra la libertad sexual aumentaron en un 21 % y un 15 %, respectivamente.

Ante estos datos, la directora del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), Natalia Salvo, asegura que, en este tipo de delitos, resulta complicado discernir si las denuncias obedecen a un aumento de la violencia hacia la mujer o a una mayor concienciación sobre este asunto que lleva a las víctimas a interponer una denuncia.

“Yo me inclino por lo segundo, porque ha habido un movimiento potente a nivel internacional, como el #MeToo y otros, para animar a denunciar este tipo de violencias. Es un tema que ha estado muy presente en el movimiento feminista y en la sociedad en su conjunto, y creo que hay más sensibilización”, comenta.

“El agresor es una persona conocida en el 90 % de los casos”

No obstante, añade que el porcentaje de casos de violencia contra la mujer que se denuncian en España todavía sigue siendo “bajo”, ya que se sitúa en torno a un 25 %, según los datos de Delegación de Gobierno en Aragón. “Solo tres de cada diez casos de violencia se denuncian”.

Este porcentaje se explica en parte con otro dato: el agresor, en el 90 % de los casos de violencia sexual, es una persona del entorno de la víctima, indica Salvo y ahí, indica, es “más complicado” romper la “barrera del silencio”.

“Cuando hablamos de violencia sexual muchas veces no dibujamos bien la radiografía. La imagen que tenemos es la de un desconocido que agrede sexualmente, porque quizá desde las instituciones hemos lanzado ese mensaje con las campañas en las fiestas, pero la realidad es que ese porcentaje es minoritario”. En la mayoría de los casos el agresor es una persona conocida y cercana, puntualiza.

Al igual que aumentan las denuncias, asciende también el número de mujeres víctimas de maltrato atendidas en el Instituto Aragonés de la Mujer. Entre enero y septiembre de 2018 (último periodo con datos aportado por el organismo), el IAM atendió a 1.946 mujeres, lo que supone 232 más que en el mismo periodo del año anterior. En enero de 2019, el teléfono de atención a las víctimas 900 504 405 atendió 344 llamadas telefónicas.

Salvo sostiene que en estos últimos cuatro años sí que han aumentado las mujeres que llegan al centro en busca de ayuda. Destaca, además, que no acuden solas, sino acompañadas por otras mujeres, lo que indica que el mensaje contra el maltrato está penetrando en la sociedad.

“Vienen en red, es decir con amigas, con sus madres o tías, con otras chicas…, que han interiorizado que esa situación no es normal y se debe denunciar”, señala Salvo, quien añade que entre las mujeres atendidas hay muchas chicas jóvenes, algunas adolescentes.

A punto de terminar su mandato en el IAM, Salvo resalta como avance de esta legislatura la aprobación de la Ley de Igualdad de Oportunidades entre Mujeres y Hombres el pasado mes de junio con el respaldo de todos los grupos parlamentarios y la activación de los protocolos en materia de violencia contra las mujeres para mejorar la coordinación desde el ámbito jurídico, sanitario, servicios sociales y fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.

El último protocolo que se ha elaborado es para la violencia sexual y la trata, que está pendiente de la aprobación del Ministerio de Interior. Desde el IAM no manejan los plazos del ministerio, pero confían en que se apruebe antes de que finalice la legislatura, concluye Salvo.

“Existe mayor conciencia de lo que es un delito contra la indemnidad sexual”

Fuentes de la Delegación del Gobierno en Aragón aseguran que, desde las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, les transmiten que “existe una mayor conciencia de lo que constituye delito contra la indemnidad sexual”, y eso se refleja en el número de denuncias.

Tanto Policía como Guardia Civil, señalan, “están haciendo un trabajo de información y sensibilización para garantizar los derechos de las personas, insistiendo en explicar a unos y a otras lo que es delito y la importancia de denunciarlo”.