“Las mujeres tienen más riesgo de sufrir accidentes 'in itinere' por culpa de la doble jornada”

El último informe de siniestralidad laboral de Comisiones Obreras Aragón concluye que, en sus desplazamientos hacia sus puestos de trabajo, las mujeres van más a menudo a pie, utilizan más el transporte público y tienen menos acceso a los vehículos privados. Sin embargo, son ellas las que sufren más a menudo accidentes in itinere. El secretario de salud laboral de este sindicato, Luis Clarimón (Zaragoza, 1962), reconoce que no hay datos que expliquen en detalle esta paradoja. Por eso, reclama una encuesta que analice las causas de todos los accidentes laborales y enfermedades profesionales.

¿Cómo han aumentado los accidentes laborales este último año en Aragón?

El número total de accidentes de trabajo fue 14.566, no ha dejado de incrementarse desde el año 2012. De esos accidentes, algo más de 2.000 son in itinere y 487 son enfermedades profesionales. Todas las cifras suben con respecto al año anterior, pero en los in itinere es donde hay más incremento, del 13'5%. Los accidentes in itinere son los que se producen en el tiempo de ir o de volver del trabajo y vemos que, a diferencia del resto de los accidentes, son una siniestralidad más femenina: hay 794 hombres y 1.212 mujeres. Lo cierto es que no tenemos unos datos científicos que nos digan exactamente por qué ocurre esto, pero sospechamos que tiene que ver con la doble jornada que suelen realizar las mujeres, con las tareas de cuidados, de atender a los hijos, de llevarles al colegio, de atender a los mayores... Todo eso hace que las mujeres salgan de casa con más prisas, con más urgencia, y que puedan tener mayor riesgo sufrir un accidente in itinere. Por estadística, sabemos que las mujeres tienen menos acceso al carnet de conducir y también que en los hogares en los que sólo hay un coche, lo suele utilizar el varón. Siempre hay excepciones, por supuesto. Por tanto, las mujeres son las que más van a trabajar andando o en transporte público en las ciudades. Donde hay ruta de autobús de empresa, ruta de transporte colectivo, la siniestralidad es menor.

Entonces, si las mujeres utilizan más el transporte público y los desplazamientos a pie, ¿aún es más significativo que las víctimas de la mayoría de los accidentes in itinere sean mujeres?in itinere

Tendríamos que tener en cuenta el porcentaje de hombres y mujeres que van a trabajar a polígonos o a empresas fuera de la ciudad. En Aragón, salvo PLAZA, los polígonos están masculinizados. En todo caso, lo que está claro es que muchas empresas se han ido a polígonos al exterior de las ciudades y en algunas ocasiones no hay transporte colectivo o público. Por tanto, la única manera de ir a trabajar es en coche, provocando atascos, accidentes de tráfico, estrés... La estrategia aragonesa de seguridad laboral incluye entre sus medidas una encuesta de condiciones de trabajo. Antes, se hacía una encuesta nacional de este tipo, pero los recortes acabaron con ella. Pues bien, esa encuesta es fundamental para saber cuáles son las prioridades que hay que atender, cuáles son las causas de enfermedades profesionales, de siniestralidad... Ahora no tenemos esos datos. Necesitamos, por ejemplo, mejorar la coordinación entre administraciones para que la Guardia Civil de Tráfico, en sus atestados, incluya también si los accidentes son de personas que estaban acudiendo o volviendo de trabajar y por qué se han producido. Hay en marcha una comisión de trabajo con la dirección provincial de Tráfico, pero habría que ir concretando.

A la espera de esa encuesta, ¿qué pensáis en Comisiones Obreras que se podría hacer para reducir los accidentes in itinere? in itinere

Lo primero es tenerlos en cuenta en las evaluaciones de riesgo. A las empresas les resulta difícil evaluar estos riesgos in itinere, pero tienen la obligación de evitarlos con su servicio de prevención. En el caso de los polígonos industriales o empresariales, hay muchas empresas que no tienen ni autobús de empresa ni transporte público. Por ejemplo, hay empresas que están dando bonos a trabajadores que van a sus puestos en bicicleta o bonos de transporte público. También se pueden mancomunar distintas pequeñas empresas para usar un transporte colectivo. Cuantas más personas tengamos en esas rutas, podremos ofrecer al trabajador rutas más cortas en el espacio y más breves en el tiempo. Esas personas van a tener menos posibilidades de accidentes, van a ir al trabajo más despejadas, van a poder descansar en el autobús, hablar con sus compañeros o incluso estudiar inglés si quieren. La ley de economía sostenible vigente dice que las empresas de más de 200 trabajadores deberían tener planes de movilidad sostenible al trabajo. Hay muchas medidas que se pueden poner en marcha, pero la primera sería evaluar.

¿Pensáis que la precariedad está relacionada con este aumento de accidentes in itinere?in itinere

La precariedad está relacionada con los accidentes en general. La siniestralidad y la precariedad van de la mano porque significa que las personas tienen menos formación, han recibido menos sensibilización en prevención de riesgos, tienen menos experiencia en el trabajo, hay mayor rotación... De hecho, ¿quiénes sufren más accidentes por porcentaje? Pues las personas que llevan menos de tres meses en el trabajo.

¿Esa precariedad puede obligar a los trabajadores a hacer desplazamientos más largos?

No tenemos más información sobre los in itinere; no disponemos tampoco de datos sobre las distancias que recorría cada persona que ha tenido un accidente de este tipo. De todas formas, pensamos que, en el Estado español, tanto los accidentes como las enfermedades profesionales están infra declarados, están ocultos. Es decir, muchos accidentes pasan por accidente común y muchas enfermedades profesionales, por enfermedad común. Al no declararse, pasan varias cosas. Por un lado, que en la estadística no existen y, por tanto, no aparecen en las medidas preventivas. Por otro lado, que la seguridad social se hace cargo del coste de esas enfermedades y accidentes cuando quien debería hacerlo son las mutuas profesionales. Esto también es interesante cuando hablamos de proteger el sistema de la seguridad social para que no tenga déficit, que es un patrimonio de todos. En algunas comunidades autónomas, se han puesto en marcha mecanismos de médicos centinela en los que cualquier persona que acude a un centro de salud de atención primaria o de urgencias con una enfermedad susceptible de ser originada en el trabajo es derivada a las mutuas, gracias a la formación adecuada que han recibido esos sanitarios. Navarra, que tiene ese sistema de médicos centinela de salud laboral, es la comunidad autónoma donde más enfermedades profesionales se declaran, con creces. La estrategia aragonesa de salud laboral prevé este sistema de médicos centinelas; se tiene que poner en marcha este año.