El verano en Aragón ha sido muy cálido, superando en más de un grado la temperatura promedio en el periodo de referencia, entre 1991 y 2020. Las temperaturas en julio y agosto fueron especialmente altas, lo que sitúa el verano de 2024 como el quinto más cálido desde que hay registros.
De hecho, la ciudad de Zaragoza alcanzó su temperatura mínima más alta de la serie histórica el 30 de julio, con los 28,1ºC registrados en el Aeropuerto de Zaragoza. Se trata de una cota muy superior al anterior récord, del año 2023, cuando el 23 de agosto se alcanzaron los 25,7ºC, primera vez que Zaragoza no bajó de los 25 grados y tuvo una noche ecuatorial.
La delegación en Aragón de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha presentado este lunes su balance climático correspondiente al verano. Según ha detallado el delegado de la AEMET para Aragón, Rafael Requena, la estación fue muy cálida y muy húmeda en la Comunidad Autónoma, destacando que las tormentas a finales de agosto -con continuidad en los primeros días de septiembre- han tenido un carácter equiparable a las lluvias tropicales.
En cuanto a precipitaciones, los porcentajes de precipitación acumulada en el pasado trimestre con respecto a las medias de referencia (1991-2020), presentan un promedio del 124% y un carácter húmedo. Junio fue un mes húmero, julio seco y agosto muy húmedo, con un superaviz de 26mm para toda la comunidad y casos especialmente llamativos, como el de La Almunia de Doña Godina, con 254% más de precipitaciones en relación a lo normal.
El delegado de la AEMET en Aragón, Rafael Requena, ha destacado que las lluvias en agosto, por su coincidencia con temperaturas cálidas y sus características en cuanto a desarrollo -puntuales y muy efectivas, con mucha agua en poco tiempo-, pueden considerarse “de carácter tropical”.
Año agrícola
El cierre del año agrícola (del 1 de septiembre de 2023 al 31 de agosto de 2024), permite ofrecer ya su balance meteorológico. En términos generales, los porcentajes de precipitación acumulada con respecto a la media de referencia (1991-2020) presentan para el conjunto de Aragón un valor promedio del 101% y un carácter ligeramente húmedo. En temperatura, este ha sido el año agrícola más cálido de la serie con una anomalía positiva de 1,7ºC.
El trimestre conformado por los meses de septiembre, octubre y noviembre, coincidente aproximadamente con el otoño astronómico que comenzó este 22 de septiembre, será muy probablemente más cálido de lo normal en Aragón, con una probabilidad del 60% de encontrarse en el tercil superior. En cuanto a las precipitaciones, el trimestre podría mantenerse dentro de lo normal, aunque en este caso las probabilidades de que se sitúe en la media, por encima o por debajo están igualadas.
En todo caso, tal como ha apuntado Rafael Requena, las primeras semanas de septiembre están arrojando precipitaciones por encima de lo habitual en las provincias de Huesca y Teruel. Destaca especialmente el caso de Huesca, en la que, tomando de referencia las mediciones del aeropuerto, se han registrado en lo que va de septiembre 111,6 mm, frente a los 48 mm de la precipitación normal (periodo 1991-2020).