Si vives en el barrio zaragozano de Arcosur puedes hacerlo en la Avenida Mario Bros o en la calle Tetris. Si sigues tu camino recorres la Leyenda de Zelda hasta llegar a la calle de los Invasores del Espacio. Sin embargo, solo hay un edificio en medio de todas estas calles, aunque la planificación es que haya más de 20.000 viviendas en el futuro.
Aunque no todo va de videojuegos, Mario Bros se une con la Avenida Heroínas de los Sitios y, de repente, se llega a una zona de calles dedicadas a monumentos aragoneses, donde sí hay más edificios y vecinos. En este barrio, todavía en construcción, las calles aglutinan conceptos modernos, muy en consonancia con la población que lo habita y, según las previsiones, lo hará en un futuro próximo. Por el momento son unos 7.500 vecinos y vecinas los que recorren estas calles, que viven en 2.904 viviendas que ya están construidas.
Sin embargo, el barrio sigue creciendo, aunque si se observa el mapa todavía se ven muchos solares vacíos entre los edificios ya hechos o en construcción. El objetivo es que este sea uno de los barrios más grandes de toda Zaragoza, con más de 20.000 viviendas. La primera piedra se puso en abril de 2010 y en octubre del año siguiente llegaron los primeros inquilinos.
Este mes de diciembre el Ayuntamiento de Zaragoza dio luz verde al proyecto de urbanización de la Fase 2 Noroeste del Sector SUZ 89/3 Arcosur, lo que implicará impulsar más de 30.000 metros cuadrados de zona verde y tres parcelas residenciales, con capacidad para 692 nuevas viviendas, así como el viario público que las rodea.
El desarrollo urbanístico vuelve a coger impulso en el barrio de Arcosur, tras más de una década con su crecimiento estancado. “Se decidió hacerlo por áreas para promover y potenciar un desarrollo que, de forma conjunta y global, tenía menos éxito dado su complejidad”, explicó el consejero municipal de Urbanismo, Infraestructuras, Energía y Vivienda, Víctor Serrano.
En la actualidad, todo el ámbito de Arcosur tiene previstas 22.779 viviendas, de las que ya hay construidas y concedidas o solicitadas licencias para 4.205, de las que 3.040 son VPA y 1.021 son libres, por lo que se encuentra todavía al 18,4% de toda su capacidad.
Como todo barrio nuevo, las problemáticas respecto a equipamiento y servicios son protagonistas. Una de las peticiones de los vecinos de esta zona de Zaragoza es relativa al transporte. Piden que la línea de tranvía se extienda desde Valdespartera hasta Arcosur y también mejorar la lanzadera de la línea 59 que conecta con el tranvía, dejándola entre 6-8 minutos todos los días de la semana. La idea, resaltan, “es equipararse con los barrios de alrededor de Rosales del Canal, Montecanal y Valdespartera”. Los vecinos reivindican la instalación de marquesinas en todas las paradas en dirección tranvía de la línea 59, así como dársenas en las paradas consolidadas.
Los residentes también demandan mejorar las instalaciones deportivas, en concreto la pista de fútbol sala, baloncesto y skate park. También plantean una segunda zona con espacios deportivos entre la avenida de 1 de junio de 2009 y la avenida del Cierzo, donde se pueda disponer de pista de atletismo, pista de patinaje, un gimnasio en la calle y una pista de dash ball.
Instalaciones educativas
El tema educativo está siendo uno de los grandes campos de batalla de las familias que viven en Arcosur. Esta misma semana las familias del CPI Ana María Navales han publicado una carta en la que explican la evolución del centro. Hasta marzo de 2022 los niños y niñas del barrio acudían al colegio de Arcosur, luego fueron trasladados a las aulas prefabricadas.
Las previsiones contemplaban que en marzo de 2023 tuvieran un centro propio, con comedor, patio, nueve aulas de primaria y gimnasio. Sin embargo, denuncian que “los meses pasaban y desde fuera veíamos que las obras del edificio de Infantil no marchaban con la celeridad que se podía prever. El 7 de septiembre se acercaba y ni por asomo se veía un colegio en el que niños y niñas de 3 a 6 años pudieran disponer de unos mínimos de seguridad para poder desarrollar el curso con normalidad. Prueba de ello fue que los dos primeros días de clase tan solo 12 alumnos acudieron a las clases, más por imposibilidad de conciliación familiar que por convicción de que el centro fuese el mejor sitio donde dejar a nuestros hijos e hijas”, exponen en la carta difundida a los medios de comunicación.
Explican que, si no se hubieran eliminado las aulas prefabricadas dentro del colegio de Arcosur “la situación hubiera sido muy diferente”, y resaltan que en este barrio “falta de espacio no tenemos y las posibilidades de colocación de las prefabricadas eran muchas y todas creemos que mejores que el emplazamiento que se usó”.
En cuanto a infraestructuras sociales, los vecinos proponen la creación de una biblioteca de barrio también en la mencionada avenida y que se impulse con celeridad la Escuela Infantil proyectada en Arcosur. También han tenido problemas con apagones durante los últimos meses.