Arsenio Escolar es periodista y escritor. Con sus 'Crónicas lingüísticas del poder' –información, análisis y opinión de primera mano–, entrará semanalmente en elDiario.es en los detalles del poder político, económico, social... y de sus protagonistas. Con especial atención al lenguaje y al léxico de la política.
El transversal Antonio Garamendi se perfila como nuevo presidente de CEOE
El próximo 21 de noviembre, CEOE celebrará elecciones para elegir a su nuevo presidente, al sucesor de Juan Rosell, que llega al límite de sus dos mandatos y no puede presentarse a la reelección. La convocatoria formal y la apertura del plazo de presentación de candidaturas se hará 40 días antes de esa fecha, pero todo indica que salvo sorpresa solo habrá un candidato, Antonio Garamendi, y que si hay algún otro postulante, las posibilidades de este último serán mínimas o incluso inexistentes. Garamendi lleva preparando estas elecciones desde hace mucho, visitando una a una las casi 200 organizaciones sectoriales y territoriales en las que se integran unos dos millones de empresas y autónomos y que componen la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). “Antonio lleva preparando y ganando estas elecciones casi desde el día, hace ya casi cuatro años, en que perdió por muy poco frente a Rosell”, cuentan en su entorno.
Antonio Garamendi Lecanda cumplió 60 años en febrero pasado. Su trayectoria personal y profesional parecían encaminadas desde siempre a un destino como el que ahora parece que le aguarda. Nacido en Getxo (Vizcaya), licenciado en Derecho por la Universidad de Deusto, tiene una larga trayectoria no solo en la gestión empresarial o en consejos de administración de diversas compañías (La Equitativa, Bankoa, Handyman, Grupo de Negocios de Ediciones y Publicaciones, Babcock & Wilcox Española, Albura, Red Eléctrica Española, Tubos Reunidos, Sodexho…) sino también en el asociacionismo empresarial. Fue presidente de los Jóvenes Empresarios vascos, luego de los españoles y de los iberoamericanos, más tarde de la poderosa Confemetal... En diciembre de 2014 intentó por primera vez acceder al liderazgo de los empresarios. Perdió por muy poco, por solo 33 votos. Logró 312 papeletas, frente a las 345 del ya entonces presidente, Rosell. Pactaron no desencadenarse una guerra interna. Rosell, presidente; Garamendi, vicepresidente y presidente -que ya lo era- de Cepyme.
No han sido años tranquilos en la patronal. Rosell emprendió un proceso de cambios y de transformación en una organización que salía del sobresalto del mandato del controvertido -y procesado, y encarcelado- Gerardo Díaz Ferrán (2007 a 2010) y de los larguísimos 23 años de poder omnímodo de José María Cuevas (1984 a 2017). Antes de Cuevas, CEOE sólo había tenido un presidente, Carlos Ferrer Salat, desde la fundación en 1977 hasta 1984.
Sus detractores le reprochan a Rosell que todo ha ido algo lento y ha resultado un poco tibio. “No ha escuchado todo lo que debía ni a las organizaciones sectoriales ni a las territoriales”, se le reprocha. El conflicto político general en uno de los territorios, Cataluña, le ha salpicado al barcelonés Rosell en el resto de España ante su propia organización. Han abundado las voces críticas - algunas fundadas, otras quizás no tanto- con su presunta indefinición con el procés.
No sólo a Rosell. A Joaquin Gay de Montellá, su sucesor en la presidencia de Fomento del Trabajo Nacional -la patronal catalana-, también le ha perjudicado la escalada independentista de estos años. Hace diez meses, Gay de Montellá se postulaba para intentar el salto a Madrid, a presidir la CEOE. Hoy esa posibilidad está prácticamente descartada. Gay pulsó con qué apoyos podía contar, en Cataluña y en otros territorios, y vio pronto que en la piscina apenas había agua. Otros nombres que se barajaron, como el de Juan Pablo Lázaro -presidente de Ceim, la patronal madrileña, y uno de los vicepresidentes de Garamendi en Cepyme-, también se han diluido o se han autodescartado. ¿Puede salir algún tapado de última hora? “No lo veo. Medirse con Antonio sería suicida”, comenta alguien que conoce muy bien la gran patronal por dentro.
Garamendi, según sus colaboradores, no da aún por ganada la batalla, pero ya prepara los ejes básicos de su gestión. Intentará darle mayor velocidad al proceso de cambios internos, especialmente en transparencia y en participación. Y, sobre todo, despolitizará la organización. “Lo nuestro no es la política, sólo la política económica. Represento a gente de distintas sensibilidades políticas: desde el PP al PSOE, de PNV a Convergència”, se le ha escuchado decir en privado. Será -si como parece, llega- un presidente negociador y transversal.
Tenía una fluida relación con Mariano Rajoy y con su ministra de Empleo, Fátima Báñez, y la tiene con Pedro Sánchez -aunque más reciente- y con su ministra del ramo, Magdalena Valerio, a los que ve más dispuestos a escuchar de lo que lo estaban sus antecesores. Tenía y tiene tan buena relación con los líderes sindicales de Comisiones Obreras y de UGT -Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez cuando Garamendi llegó a la primera fila de la patronal, Unai Sordo y Pepe Álvarez ahora- como con el rey anterior, Juan Carlos I, y con el rey actual, Felipe VI.
Pero que Garamendi no quiera hacer política no significa que su CEOE, si como parece la preside, se resigne a aceptar sin rechistar la política económica del Gobierno de Sánchez. Ni mucho menos. Darán la batalla, especialmente en el debate de los nuevos impuestos. No tanto en el de sociedades como, sobre todo en el diésel, por ejemplo.
¿Y por qué no en el impuesto de sociedades? Quizás porque junto a una subida a las grandes corporaciones, en el Gobierno de Sánchez y en su aliados de Unidos Podemos están pensando en aflojar la presión fiscal a las pymes. Con Garamendi de presidente de CEOE -si como parece llega a serlo-, el peso de Cepyme en la dirección de la gran patronal y en sus estrategias tenderá a aumentar.
Sobre este blog
Arsenio Escolar es periodista y escritor. Con sus 'Crónicas lingüísticas del poder' –información, análisis y opinión de primera mano–, entrará semanalmente en elDiario.es en los detalles del poder político, económico, social... y de sus protagonistas. Con especial atención al lenguaje y al léxico de la política.