El desarrollo del Corredor Atlántico ferroviario y su conexión con la Zona de Actividades Logísticas e Industriales (ZALIA) que permitan convertir a Asturias en el gran polo logístico del Cantábrico son los ejes vertebradores del nuevo acuerdo de la Alianza por las Infraestructuras que este miércoles han suscrito Gobierno autonómico, partidos políticos agentes sociales y económicos.
“Estamos inaugurando una nueva era en las comunicaciones en Asturias”, ha afirmado tras la firma el presidente del Principado, Adrián Barbón, que ha advertido de que hay que olvidar los viejos tópicos de que la falta de comunicaciones lastra el despegue económico de la comunidad y que ve cómo el “complejo de aislamiento va quedando atrás”.
Siete años después de que se firmase el primer documento, el apoyo a la que será la hoja de ruta del Principado a la hora de exigir actuaciones al Gobierno central en materia de infraestructuras se ha visto incrementado con el apoyo de todos los grupos que forman parte del parlamento asturiano, incluido Vox.
Se trata de un documento de mínimos -no incluye por ejemplo la Ronda Norte de Oviedo porque no hubo el consenso necesario- que marca las prioridades de Asturias en infraestructuras ferroviarias, carreteras y movilidad sostenible para los próximos años y que, según el consejero de Fomento, Alejandro Calvo, permitirá mejorar la calidad de vida de los asturianos y sus perspectivas de futuro.
Suscrito por la patronal, los sindicatos UGT, CCOO, USO, CGT y varios ferroviarios, las cámaras de Comercio, PSOE, PP, IU, Vox, Foro y la diputada del Grupo Mixto, así como por varias asociaciones de transportistas y consumidores, el acuerdo es una “buena muestra de cuando se antepone el diálogo y el consenso a todo lo demás”, ha afirmado el jefe del Ejecutivo asturiano.
Continuar con la mejora del AVE, para aumentar velocidad, las plazas disponibles y las paradas; el impulso de las actuaciones programadas en el Corredor Atlántico; la integración ferroviaria de Gijón y Langreo; la apuesta por la supresión del peaje del Huerna; la mejora de la vertebración del Suroccidente con la conclusión de la A-63; un nuevo acceso al puerto de El Musel, o la mejora de movilidad en el área central y metropolitana son algunos de los retos que se marca este documento.