Asturias no apoya la reclamación de los fondos transitorios que piden comunidades autónomas como Castilla La Mancha, gobernada también por el PSOE, o Murcia y Andalucía, en manos del Partido Popular. El gobierno asturiano cree que estos fondos son contrarios a sus intereses y dificultarían lograr un acuerdo, ya de por sí difícil, para establecer un nuevo modelo de financiación autonómico en esta legislatura.
Pese a esta posición el ejecutivo de Adrián Barbón mantendrá el frente común con las comunidades que firmaron la Declaración de Santiago, en la que defendían que la financiación se negocie multilateralmente en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera y que se base en el coste de los servicios y no en la población ajustada.
“Asturias goza de una posición privilegiada para afrontar el debate desde la unidad de acción”, ha afirmado el consejero de Hacienda y Fondos Europeos, Guillermo Peláez, que ha comparecido esta mañana en el parlamento asturiano. Según Peláez el acuerdo suscrito en junio de 2020 por todos los grupos parlamentarios asturianos, salvo Vox, sigue plenamente vigente al igual que la Declaración de Santiago.
En ambos casos se apuesta por abordar una reforma que atienda al coste efectivo y real de los servicios que se prestan en cada territorio por lo que, con las bases del modelo “tan claras y consensuadas” en el ámbito interno y con otras comunidades, “es muy necesario para Asturias que se vuelva a abrir este debate”.
Tras reconocer que será muy complejo, porque en esta legislatura costará forjar mayorías y hay intereses contrapuestos entre comunidades, Peláez ha asegurado que tiene constancia de que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, va a hacer un esfuerzo para conseguir esa reforma.
No obstante, ha señalado que aún no se ha reunido con la ministra -recientemente anunció que lo haría con todas las comunidades-, pero que sí ha tenido contactos informales con el secretario de Estado.
En cualquier caso, ha incidido en que la reforma tiene que ser fruto de negociaciones multilaterales en el seno del CPFF y que es bueno que el parlamento asturiano haya mostrado una posición de unidad en la defensa de los intereses de Asturias, “más allá de cualquier condición partidista”.
“Valoramos muy positivamente que el PP no se haya movido de esa posición”, ha señalado el consejero, que, sin embargo, sí que ha pedido a los populares que reconsideren su postura en el Senado, donde votaron en contra del techo de gasto, para evitar que Asturias pierda 29 millones.
Tras asegurar que va a ser “absolutamente transparente”, que va a informar en tiempo real de las negociaciones y contactos que mantenga en materia de financiación y que no descarta volver a reunirse con todos los grupos parlamentarios para ratificar su unidad, Peláez ha dicho que no duda de la posición “activa y leal” del Gobierno central y que no ve injerencias en la autonomía fiscal.
Partidario de la armonización fiscal entre comunidades, el consejero ha incidido en que es muy importante definir un catálogo de prestaciones y dos niveles de financiación diferenciados: el que atienda los servicios básicos en términos de equidad y el que permita incrementar esa cartera básica con los impuestos cedidos.