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La Audiencia de Asturias anula la condena por acoso laboral a un jefe policial en Siero y vuelve la tensión a comisaría

Fidel Fernández, en el banquillo del juzgado de lo Penal 2 de Oviedo, en abril de 2024, en el juicio ahora anulado.

Pilar Campo

Oviedo —

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Las denuncias cruzadas por acoso laboral entre policías afiliados a CSIF y al Sindicato Independiente de la Policía Local de Asturias (Sipla) están dinamitando las relaciones personales y profesionales en la comisaría de la Policía Local de Siero, el cuarto municipio de Asturias.

Una situación laboral que ha dividido a la plantilla y que a medida que van sucediéndose las sentencias a favor y en contra enrarecen aún más la difícil convivencia entre agentes y jefes.

El último episodio, que ha roto la inestable calma que reina habitualmente en las dependencias policiales, ha llegado a raíz de la sentencia dictada por los magistrados de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Asturias por la que han anulado la condena al jefe accidental de Siero, Fidel Fernández, defendido por el abogado Luis Tuero.

La 'guerra' sindical

El juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo le había impuesto, el pasado 3 de abril de 2024, una pena de 18 meses de cárcel, inhabilitación especial para el desempeño de la profesión de policía durante el tiempo de la condena y el pago de 9.000 euros por un delito contra la integridad moral y le había absuelto de la acusación por un delito de lesiones psíquicas.

Contra esa sentencia, el abogado Guillermo Calvo interpuso un recurso de apelación en representación del agente Daniel M.G., quien habia denunciado al jefe accidental por acoso laboral.

Desde un principio, el jefe accidental atribuyó la denuncia a una “guerra sindical” entre el CSIF, al que él pertenece, y el Sipla al que el denunciante está afiliado.

La argumentación de los magistrados

En la sentencia, a la que ha tenido acceso elDiario.es Asturias, el tribunal argumenta que la comisión de un delito de acoso laboral en el ejercicio de sus funciones, en base “al hostigamiento referido por el denunciante, agente de la Policía Local de Siero, por parte del subinspector denunciado, quien era superior jerárquico del mismo, es claro que de acuerdo con el artículo 8.1 de la Ley Orgánica de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, la competencia objetiva para su enjuiciamiento y fallo corresponde a la Audiencia Provincial”.

Concretamente, este articulo recoge lo siguiente: “La jurisdicción ordinaria será la competente para conocer de los delitos que se cometan contra miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, así como de los cometidos por éstos en el ejercicio de sus funciones”.

“Iniciadas unas actuaciones por los Jueces de Instrucción, cuando éstos entiendan que existen indicios racionales de criminalidad por la conducta de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, suspenderán sus actuaciones y las remitirán a la Audiencia Provincial correspondiente, que será la competente para seguir la instrucción, ordenar, en su caso, el procesamiento y dictar el fallo que corresponda”.

La falta de competencia

Por ello, la Sala estima que la falta de competencia objetiva del Juzgado de lo Penal para el enjuiciamiento y fallo de esta causa conlleva “inexcusablemente” la nulidad del juicio oral.

La sentencia ha sido acogida con satisfacción por el sindicato CSIF que considera que para la repetición del juicio podrán aportar pruebas que “no se permitieron aportar en el primero juicio, así como testigos y periciales”, señalan sus portavoces.

CSIF: “Sufrió una pena de telediario irreparable”

Para el sindicato, Fidel Fernández ha sufrido una “pena de telediario irreparable” que le ha costado un infarto a su mujer y una depresión a él mismo “por una acusación y condena injusta”.

Según CSIF, tanto el denunciante como el Sipla “han utilizado y ridiculizado el problema del acoso laboralque cuando existe es un problema grave, y que en este caso -añaden- es simplemente que el trabajador denunciante no está contento en su trabajo y por tanto acumula bajas de forma reiterada e intenta acabar con el alcalde y con su inmediato superior, indicando que cualquier aspecto de los poquísimos días que pudo haber trabajado, son actos de acoso laboral”.

El alcalde se posiciona

El alcalde, el socialista Ángel García “Cepi”, se ha posicionado a favor del jefe accidental de Siero, al que ha mostrado su apoyo.

El pasado sábado, “Cepi” aseguró que confiaba “plenamente” en la inocencia de Fidel Fernández y recordó que él siempre lo defendió y gozó de su confianza.

Además, exigió que “todos aquellos que llevan ya varios años juzgándolo, condenándolo y haciéndole daño con el único objetivo de destruir a las personas deberían, como mínimo, pedir disculpas públicamente”.

El alcalde indicó que el jefe accidental de la Policia Local de Siero había sido victima de una campaña de acoso y derribo “única y exclusivamente -afirmó- porque no quiso entrar al juego sucio del Sipla”.

“Esas personas o personajes, que tenemos cada vez menos en Siero, solo buscan servir a los ciudadanos cada vez menos y no cumplir con sus obligaciones. Les da igual -añadió- que para ello tengan que denunciar y acabar con compañeros y con políticos”.

La réplica del SIPLA a “Cepi”

Unas declaraciones que inmediatamente han tenido su réplica por parte del SIPLA. A través de una nota de prensa, el sindicato ha denunciado las manifestaciones de “Cepi” donde, según expone, “nuevamente defiende e intenta justificar los comportamientos humillantes y vejatorios a los que el jefe de la Policía Local sometió a un subordinado”.

En el escrito, recuerda que Fidel Fernández además del procedimiento actual que acaba de ser anulado también esta inmerso en otra causa judicial por otra denuncia de acoso laboral y lesiones psíquicas.

“Lamentamos que el alcalde, jefe orgánico de la Policía Local y jefe de Personal del Ayuntamiento de Siero se posicione del lado del presunto acosador, olvidando que la víctima no es quien se va a sentar en el banquillo de los acusados, sino su hombre de confianza, a quien puso a dedo al frente del Cuerpo policial, haciendo caso omiso de las advertencias del Comisario Jefe, y sobradamente conocedor del comportamiento de Fidel Fernández”.

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