Pocas novedades en la mañana de este viernes en la Junta General del Principado, que ha dado el visto bueno definitivo a los presupuestos autonómicos para 2025, que ascienden a 6664 millones, un 4,5 por ciento más que las cuentas de este año.
El proyecto han contado con el apoyo de los grupos que conforman el gobierno, PSOE e IU-Convocatoria por Asturies, y la diputada del grupo mixto Covadonga Tomé, y el rechazo de toda la bancada de la derecha, PP, Vox y Foro, cuyo diputado, Adrián Pumares, explicaba su rechazo a unas cuentas que no incluyen medidas que vayan a mejorar sustancialmente la vida de los asturianos.
La Junta General ha votado las 174 enmiendas parciales que las formaciones políticas han presentado al documento, entre las que han salido adelante las dos elaboradas por el PSOE para corregir el error sobre las bonificaciones para herederos de cuarto grado en el impuesto de sucesiones y permitir, en 2026, una rebaja del 99 por ciento.
Estas enmiendas que ayer no se incorporó al dictamen final, dado que IU-Convocatoria por Asturies y Tomé se negaron a respaldar, han salido hoy adelante en el pleno de la parlamento con el voto a favor del socio de Gobierno y también de Foro.
No responderemos a la irresponsabilidad con más irresponsabilidad, y a la deslealtad con más deslealtad
El portavoz de Convocatoria por Asturies, Xabel Vegas, ha afeado que el PSOE haya tratado de solucionar un error “con más errores” al reservar de forma unilateral una enmienda que saben no es del agrado de su socio de gobierno, aún así, explicaba el apoyo final de su grupo pues “no responderemos a la irresponsabilidad con más irresponsabilidad, y a la deslealtad con más deslealtad”.
La polémica comenzó en el pleno pasado cuando el PP cuestionó que no se incluyese dicha bonificación, si bien el consejero de Hacienda, Guillermo Peláez, aseguró que sí estaba recogido en las cuentas, aunque se trató de un error dado que con la actual redacción la rebaja se mantendría en el 4 por ciento al no incluir la legislación estatal bonificaciones para el cuarto grado.
El proyecto de presupuestos contempla una dotación de 4400 millones que se destinarán a gasto social y más de 1000 a inversiones productivas.
La mayor partida presupuestaria se la sigue llevando la sanidad, que absorberá 2641 millones de euros, mientras que los recursos destinados a educación se elevarán a 1115 millones y los consignados a políticas sociales a más de 809 millones, lo que supone un incremento de casi el 16 por ciento.
Uno de los mayores incrementos se los lleva el capítulo de vivienda que, con una subida del 60 por ciento respecto a las cuentas de este año, dispondrá de una partida de 156 millones de euros.
Las cuentas avanzan en la llamada vía fiscal asturiana con nuevas deducciones de hasta 2000 euros por gastos básicos para jóvenes de hasta 35 años con el fin de que puedan incrementar su renta disponible y emanciparse.
La diputada Tomé, que ya anunció su voto a favor hace unas semanas, ha señalado que presupuestos del Principado, sin ser los que ella propondría, apuestan por los servicios públicos y adelantan avances sociales.
No obstante, ha precisado que “faltan y sobran algunas cosas” para la Asturias a la que aspira, y ha reivindicado asuntos como la oficialidad del asturiano y la aprobación de la Ley LGTBIQ+.
PP y Vox critica la falta de rigor
El PP, por su parte, ha criticado la falta de rigor del proyecto, al estar elaborado con cifras infladas y cuya negociación ha sido una farsa, y ha denunciado la incompetencia y frivolidad del consejero de Hacienda, Guillermo Peláez, dado que desconocía sus propias cuentas.
“Usted mintió y debería irse. Váyase señor Peláez; ha perdido el escaso crédito político que tenía”, ha afirmado el diputado popular Luis Venta.
Sobre esta cuestión también se ha pronunciado el parlamentario de Vox Gonzalo Centeno, quien, tras lamentar la falta de rigor del proyecto, ha subrayado que la oposición hubiera disculpado galantemente al titular de Hacienda si este hubiese empleado unas formas más templadas y sin perder los papeles.