La Policía Nacional ha liberado a tres mujeres de origen sudamericano que ejercían la prostitución bajo amenazas en pisos de contactos de Oviedo en una operación en la que han sido detenidas cuatro personas que presuntamente se encargaban de las tareas de vigilancia y control de las víctimas, así como de la promoción de los servicios en páginas web especializadas de contactos en Internet.
La operación policial se desarrolló entre los meses de marzo y junio, pero no ha trascendido públicamente hasta este lunes en que la Jefatura Superior de Policía de Asturias ha confirmado las detenciones y el posterior ingreso en prisión de los cuatro arrestados: tres hombres y una mujer, naturales de Rumanía.
La operación policial corrió a cargo de los agentes de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Asturias que llevaban vigilando a los presuntos integrantes de la organización dedicada a la explotación de mujeres de origen sudamericano desde el pasado mes de marzo.
Según el relato policial, los ahora detenidos contactaron con las víctimas a través de la táctica conocida como “Lover Boy”. Esta técnica consiste en la captación de mujeres en sus países de origen, a las que posteriormente hacen creer que se han enamorado de ellas para crear una dependencia hacia su proxeneta y a las que seducen mediante engaños, chantaje emocional y coacciones. En la mayoría de los casos se aprovechan de la situación de necesidad o vulnerabilidad de las mujeres.
La Policía Nacional ha confirmado que los detenidos controlaban todas las actividades diarias de las mujeres, a las que escoltaban en su desplazamientos fuera de los pisos donde ejercían la prostitución.
Una parte de los beneficios obtenidos con la explotación sexual de las mujeres era enviado a Rumania, país de origen de los investigados, mediante empresas de transferencias de dinero.
Víctimas vulnerables y que atraviesan dificultades económicas
La operación policial culminó el pasado 13 de junio con el arresto de los cuatro detenidos que, tras pasar a disposición judicial, han ingresado en prisión.
El titular del juzgado ha imputado a los detenidos su presunta autoría en delitos contra los derechos de los trabajadores, relativos a la prostitución, blanqueo de capitales y contra la salud pública.
La Jefatura Superior de Asturias ha asegurado que el incremento de los pisos de contactos donde se ejerce la prostitución favorece que se puedan escapar al control legal sobre las actividades que se ejercen en las viviendas, por lo que se convierte en un caldo de cultivo para generar situaciones de explotación sexual y laboral.
Los proxenetas se aprovechan además de la situación de vulnerabilidad de las víctimas que generalmente suelen ser jóvenes extranjeras, procedentes de bajos estratos sociales, y que habitualmente tanto ellas como su entorno familiar atraviesan grandes dificultades económicas.