Ganaderos asturianos denuncian la situación límite que viven derramando una cuba de leche en su protesta

elDiario.es Asturias / Efe

Oviedo —
10 de octubre de 2023 16:59 h

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Más de doscientos ganaderos con una veintena de tractores se han concentrado esta mañana ante la sede de la consejería de Medio Rural del Principado de Asturias en una nueva protesta por la situación “límite” que aseguran estar atravesando. Lo han hecho derramando una cuba de leche, gesto simbólico con el que han exigido el cumplimiento de la cadena alimentaria “Nos es más barato tirar la leche que ponerla en el mercado”, aseguraban.

Durante la protesta, convocada por el sindicato Unión Rural Asturiana (URA) y secundada por UCA y Usaga, los manifestantes han planteado sus reivindicaciones sin conseguir que el consejero de Medio Rural, Marcelino Marcos Líndez, los recibiera.

“Señor consejero, la realidad del campo no es la que divisa desde la cristalera de su confortable despacho, el sector primario se está muriendo en Asturias y se lo venimos a trasladar alto y claro”, han dicho el secretario de URA, Borja Fernández, encargado de leer el manifiesto en el demandan una reunión urgente de la cual puedan “salir medidas firmadas, concretas, contundentes y claras para intentar empezar a revertir el declive del sector agrario asturiano” o tendrán que dar un “paso más”.

Además de la aplicación urgente de la Ley de cadena alimentaria, los ganaderos reclaman medidas para los elevados precios de pienso, forrajes y carburantes; una partida digna en los nuevos presupuestos para paliar los efectos de la sequía, y medidas frente a la fauna salvaje. Aseguran que los últimos anuncios del titular de Medio Rural, Marcelino Marcos Líndez, de complementar las ayudas estatales o agilizar el pago de las subvenciones por daños al ganado son “una tomadura de pelo”.

También han comentado que desde la llegada del nuevo equipo a la consejería les han hecho llegar varias propuestas que mejorarían su situación pero aseguran que no se han tenido en cuenta y denuncian también la convocatoria para reuniones que se han suspendido 24 horas antes de celebrarse, sin argumento ninguno.