El Gobierno asturiano impulsa obras de mejora en el refugio de Brañagallones, en el Parque Natural de Redes

El Gobierno asturiano ha autorizado un gasto de 731.188 euros para contratar las obras de mejora de la eficiencia energética del refugio de Brañagallones, situado en el Parque Natural de Redes (Caso), una actuación que puede optar a financiación del Fondo de Transición Justa de la Unión Europea.

Con esta medida, y según explican en una nota de prensa, el Gobierno del Principado avanza en la revitalización de este albergue para fomentar un turismo sostenible que contribuya a la diversificación y desestacionalización de los usos de este equipamiento de montaña, promocionando, además, la cadena de valor turística y el tejido empresarial local.

Por otra parte, el Consejo de Gobierno ha aprobado un paquete de ayudas para apoyar la modernización del sector pesquero, con 5,7 millones de euros. Estas subvenciones se incluyen en la estrategia de esta actividad para el período 2020-2030, que prevé medidas específicas en función de los rasgos distintivos de este ámbito económico en la comunidad.

Concedidas en el marco del Fondo Europeo Marítimo de Pesca y Acuicultura (Fempa), se distribuyen en tres líneas: promover la viabilidad económica y el atractivo de la pesca; optimizar el uso de la energía de los buques; y planes de explotación que busquen mejorar la sostenibilidad y garantizar la actividad a largo plazo.

Mejora de la empleabilidad

Por último, también se ha autorizado un gasto plurianual de 4,4 millones para financiar programas de formación que permitan obtener certificados profesionales a más de 4.400 personas que ya están trabajando en el mercado laboral asturiano.

De esa manera, el colectivo podrá aumentar sus competencias, su currículum y su cualificación para estar en condiciones de mejorar su empleabilidad y acceder a trabajos de mayor calidad.

El desembolso aprobado hoy va acompañado de modificaciones en las bases de la convocatoria que gestiona el Sepepa. Así, la formación se adapta al modelo dual (combinación de las clases teóricas con las prácticas en empresas), con la reserva del 10% de las plazas para personas con discapacidad.

Por primera vez, se abre la posibilidad de que participen en las acciones formativas aquellos alumnos que se encuentren en proceso de homologación de titulaciones académicas obtenidas en el extranjero.

También se permite la formación a distancia, en aulas virtuales, de residentes en concejos de los considerados prioritarios para el reto demográfico, con poca población y dificultades en las comunicaciones.