La Consejería de Salud del Principado de Asturias ha lanzado la campaña ¡Libérate del tabaco y disfruta la vida! destinada a combatir el consumo de tabaco entre la población juvenil. La iniciativa persigue la prevención global del tabaquismo, desde el cigarrillo convencional a las nuevas modalidades electrónicas, además de fomentar un estilo de vida libre de humo.
La campaña, que incluye mensajes educativos, claros e impactantes, no solo tiene por objetivo proporcionar información, sino también motivar a la juventud para crear conciencia sobre los riesgos del tabaco. Incluye diez clips de diez segundos de duración en los que se aborda una temática variada, así como doce carteles que apoyan el mensaje de una vida sin tabaco.
Entre el 80% y el 90% de los fumadores adultos inician su hábito en la adolescencia. El tabaco sigue siendo la segunda sustancia psicoactiva más utilizada entre el alumnado asturiano de 14 a 18 años. En cuanto a la edad de inicio, muestra cierta estabilización: desde 2016 se mantiene en los 14,1 años.
No obstante, la prevalencia del consumo se ha reducido 4,8 puntos respecto a 2021 y actualmente se sitúa en menos de la mitad que hace 25 años. Además, la Encuesta sobre el Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias (Estudes) de 2023 revela que la prevalencia de consumo diario en los últimos 30 días ha alcanzado su mínimo histórico: un 7,7%.
Por otro lado, el 28,2% del alumnado que reconoce haber fumado en los últimos doce meses no se plantea dejar de hacerlo, una postura más frecuente entre los chicos. En el lado contrario, un 41,5% sí ha intentado dejar el tabaco, una actitud más común entre las chicas.
Impacto de los cigarrillos electrónicos
El auge de los vapeadores o cigarrillos electrónicos en la última década ha marcado una transformación en la dinámica del consumo de tabaco. A pesar de la percepción inicial como alternativa más segura, los estudios científicos reflejan riesgos sustanciales asociados al vapeo.
Estudes 2023 refleja un aumento en el consumo experimental de cigarrillos electrónicos entre el alumnado de 14 a 18 años, que pasa del 40,8% al 47,3%. El incremento más significativo se produce entre las chicas (del 36,4% al 52,3%). En cuanto a la edad, ese consumo experimental se acentúa a partir de los 16 años, por lo que la prevalencia crece en once puntos entre los 17 y los 18 (del 53,7% al 64,5%).