Ayuda en Acción es una Organización No Gubernamental de Desarrollo independiente, aconfesional y apartidista que trabaja en América, África y Asia con programas de desarrollo integral a largo plazo en diferentes ámbitos para mejorar las condiciones de vida de los niños y niñas, así como el de las familias y comunidades a través de proyectos autosostenibles y actividades de sensibilización.
Radionovelas que salvan vidas
- El 13 de febrero, día en que se creó Radio Naciones Unidas en 1946, conmemoramos el Día Mundial de La Radio
- Este año se quiere destacar el papel que la radio desempeña en tiempos de emergencias y desastres, subrayando que su aporte puede salvar vidas
El año 2016 se presenta como vital para los temas humanitarios, tanto por la existencia de numerosas emergencias abiertas como por la celebración en Estambul, el próximo mes de mayo, de la Primera Cumbre Humanitaria Mundial. La crisis de los refugiados sirios, los conflictos silenciados de África (República Centroafricana, Sudán del Sur), la declaración del virus zika como emergencia global o la amenaza de uno de los peores episodios del fenómeno climático de El Niño, que ya está teniendo graves consecuencias como la hambruna en Etiopía, hacen que el año que apenas estamos empezando sea decisivo para articular una respuesta humanitaria global, que incluya una apuesta decidida por la reducción de riesgos de desastres. En este contexto, el Día Mundial de la Radio es una magnífica oportunidad para reivindicar el papel que puede jugar en este ámbito un medio de comunicación de fácil acceso como es la radio.
Como apunta la UNESCO en su nota de prensa, la radio puede emitir “alertas de tsunami en Japón o Chile” o transmitir “mensajes sobre cómo evitar la transmisión del virus del ébola en Liberia o el contagio del zika en Brasil”, por lo que “desempeña un papel clave en la prevención y la mitigación de desastres y en la reducción de sus consecuencias sobre la población”. Pero además de emisiones de alertas o cuñas de prevención, otros formatos radiofónicos como las telenovelas, que en principio podríamos considerar como poco apropiados para estas labores, pueden ser también muy útiles para transmitir a las comunidades la problemática de la gestión de riesgos de desastre, dando pautas para reducirlos y responder a sus efectos.
La radionovela es un género radiofónico que se remonta a las primeras transmisiones regulares de este medio de comunicación, en la década de los 20 del siglo pasado, alcanzando sus máximas cotas de popularidad en los años 40 y 50, cuando se convirtió en una forma de entretenimiento a nivel mundial. Aunque la llegada de la televisión supuso el declive del género, lo que se ha acentuado con la diversidad de opciones de entretenimiento que posibilitan las nuevas tecnologías, en muchas zonas del mundo su popularidad no se ha perdido completamente. Por ejemplo, en Latinoamérica la radio sigue siendo el medio de comunicación con mayor disponibilidad y accesibilidad por parte de la población, especialmente en las zonas rurales, que también son las más expuestas a ciertos desastres. Además en estas zonas, por el impacto del analfabetismo, la radio ofrece una ventaja competitiva por su facilidad para llegar a audiencias de cualquier nivel sociocultural. Finalmente, las radios locales comunitarias sirven para superar otra barrera importante, la idiomática, ya que en las zonas con fuerte presencia indígena, las poblaciones que no dominan el español pueden estar informadas con emisiones radiofónicas en su lengua.
Volviendo a la radionovela, estas creaciones permiten conjugar educación y entretenimiento, planteando un conflicto, mostrando un problema e insinuando un mensaje. Aunque sea un formato de ficción, se aproxima mejor a la vida real porque se cambia el elemento discursivo del locutor por el diálogo de los personajes, que nos van narrando la historia. Es el caso de la radionovela “Vida que te queremos tanto”, una iniciativa en la que participó Ayuda en Acción en alianza con la Federación Internacional de Cruz Roja, la Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres de Naciones Unidas, la Organización Panamericana de la Salud y varias agencias de Naciones Unidas (PNUD, UNICEF y ONU/HÁBITAT).
Esta radionovela se compone de cuatro historias independientes, pero que están unidas por un personaje, Esteban. Este joven que colabora en radios comunitarias, va buscando en cada historia respuestas sobre la forma en que las comunidades pueden ser más seguras. Aunque todas las historias son ficción, han sido construidas a partir de entrevistas, historias de vida y narraciones, por lo que el día a día de las comunidades rurales está en todo momento presente. De esta forma podemos conocer las problemáticas que se derivan de los fenómenos naturales y de la acción del ser humano, aprendiendo cómo a través de la organización comunitaria, de los sistemas de alerta temprana y de la capacitación nos podemos enfrentar a ellas y, en último caso, salvar vidas.
Estos son algunos de los mensajes claves que se trasladan en la radionovela:
Los sistemas de alerta temprana por si solos no bastan para evitar que los peligros naturales se conviertan en desastres, la acción temprana es indispensable.
Es necesario aumentar la resiliencia de las comunidades y ayudarles a adaptarse a los riesgos del cambio climático.
Los derechos de niños y niñas, especialmente el de educación, deben respetarse en momentos de emergencia.
Las escuelas no deben ser utilizadas como albergues temporales, porque cada vez que se interrumpe el funcionamiento normal los niños y niñas quedan sin espacio para estudiar.
Además se pierden servicios de salud y nutrición ofrecidos en los centros educativos y existe una alta probabilidad de deserción escolar y de trabajo infantil.
Es necesario contar con establecimientos de salud capaces de seguir funcionando en situaciones de emergencias a su máxima capacidad y en la misma infraestructura, ya sean hospitales grandes o centros de salud de menor complejidad.
El proceso de recuperación temprana comienza en el momento de la emergencia y sienta las bases para una recuperación a largo plazo.
La recuperación va más allá de la reconstrucción física de la infraestructura y abarca otros aspectos claves como el restablecimiento de los servicios básicos, la recuperación de los medios de vida y generación de ingresos, la vivienda temporal.
En la recuperación hay que integrar medidas de reducción del riesgo de desastres para evitar generar nuevos riesgos. Por ejemplo a través de la selección de áreas seguras para la reubicación de comunidades y selección de las áreas donde se construirán las viviendas, escuelas, etc.
- El 13 de febrero, día en que se creó Radio Naciones Unidas en 1946, conmemoramos el Día Mundial de La Radio
- Este año se quiere destacar el papel que la radio desempeña en tiempos de emergencias y desastres, subrayando que su aporte puede salvar vidas
El año 2016 se presenta como vital para los temas humanitarios, tanto por la existencia de numerosas emergencias abiertas como por la celebración en Estambul, el próximo mes de mayo, de la Primera Cumbre Humanitaria Mundial. La crisis de los refugiados sirios, los conflictos silenciados de África (República Centroafricana, Sudán del Sur), la declaración del virus zika como emergencia global o la amenaza de uno de los peores episodios del fenómeno climático de El Niño, que ya está teniendo graves consecuencias como la hambruna en Etiopía, hacen que el año que apenas estamos empezando sea decisivo para articular una respuesta humanitaria global, que incluya una apuesta decidida por la reducción de riesgos de desastres. En este contexto, el Día Mundial de la Radio es una magnífica oportunidad para reivindicar el papel que puede jugar en este ámbito un medio de comunicación de fácil acceso como es la radio.