Hemos dedicado las 80 páginas de #Ballena32 a los océanos: una temática que permanece invisible, en la que apenas se fija nadie, siendo vital para la supervivencia de los humanos y por supuesto de la valiosa biodiversidad que lo habita. Ser un medio pequeño e independiente como Ballena Blanca tiene muchos retos complicados, el principal, mantenerse a flote. Pero una de sus grandes ventajas, si se decide asumir el riesgo, es salirse del guion.
Publicar toda una revista sobre el estado de los mares, ofrecer una mirada ambiental de lo que comemos, del impacto de la contaminación por el plástico que compramos o la soberbia presencia del animal más grande que jamás ha existido en la Tierra es una apuesta que pocos se permiten.
En diciembre de 2022, cerca de 200 países se pusieron de acuerdo, por primera vez, en que es necesario cuadriplicar la protección de los océanos. Están en peligro por el cambio climático y por la voracidad humana. Esperamos que esta revista sirva para dar luz y captar la atención sobre la importancia de proteger una parte fundamental del planeta que nos acoge.