Acusaciones falsas desde el diario ABC para criminalizar a Capital Animal

“Nuevo acto vandálico del Reich Animalista. Los salvajes de Capital Animal han atacado el monumento a José Cubero ‘Yiyo' que se encuentra en los aledaños de la Monumental de las Ventas”.

Con esa información de ABC, las personas que formamos Capital Animal nos enterábamos de que la referida estatua había sido pintada y de que, además, supuestamente, habíamos sido nosotros. Lo llaman periodismo, pero es difamación.

La información se publicó en la web de ABC. Según sus propios datos, a las 16:39 del 15 de mayo, domingo, día de San Isidro, mientras en la plaza de torturas de Las Ventas los aficionados a la sangre disfrutaban de “la fiesta”. Poco antes había concluído en la misma ciudad de Madrid el I Encuentro de Pensamiento y Acción Animalista Capital Animal, que ha reunido a artistas, escritores, filósofos, educadores, juristas, políticos y activistas con una finalidad clara: seguir avanzando hacia el fin del maltrato y la explotación de los animales.

Los ataques a Capital Animal están siendo continuos desde que existimos, pero arreciaron con la inauguración de la exposición ‘Otras Tauromaquias. En el 200 aniversario de la Tauromaquia de Goya’, en Calcografía Nacional, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Ese día, el académico delegado para Calcografía, Juan Bordes, y el director de la Real Academia, Fernando de Terán, aseguraron que esa exposición “se la debíamos” a Goya por dos siglos en los que su obra solo ha sido interpretada desde el punto de vista taurino, sin tener en cuenta la evolución del artista a lo largo de su vida ni la forma en la que la guerra marcó su obra, y a pesar de que en esa serie de grabados quedan patentes el horror y el espanto frente lo que supone la tauromaquia, sobre todo en el caso de las cuatro últimas obras, las realizadas ya en Burdeos.

La exposición en Calcografía, su contenido, el respaldo de la institución a esa relectura de Goya incendiaron los ánimos de quienes se resisten a perder su tradición, de quienes no quieren dejar de divertirse viendo a un bello y majestuoso animal humillado, torturado y asesinado en nombre de esa tradición. Ya entonces nos acusaron de tergiversar a Goya, de retorcer la historia. Nos llamaron de todo, incluso nazis, impulsores del “Reich animalista”. Nos señalaron como incitadores a la violencia a pesar de que son ellos quienes ejercen esa violencia contra los animales incluso delante de niños y adolescentes, a los que enseñan que está justificado torturar si con ello se obtiene algún beneficio, sea del tipo que sea, y aunque solo consista en pasar una buena tarde. Les enseñan, de paso, que un animal tiene que proporcionarnos alguna utilidad para que le concedamos el derecho a poder existir. Y que morir torturado es un buen motivo, basta por sí solo, para ser criado. Todo muy pacífico y muy instructivo.

Nosotras, por mucho que les pese, no somos violentas ni perpetramos actos vandálicos. Capital Animal es una plataforma para proponer y gestionar proyectos de arte, cultura y pensamiento centrados en la defensa de todos los animales. Creemos que la información y la sensibilización son las armas necesarias para comprender que la vida de un animal está por encima de nuestra diversión, y que cuando se disfruta viendo sufrir a quien se dice amar hay algo que no encaja.

La excepcional acogida que Capital Animal está teniendo en la ciudad de Madrid, la multitudinaria afluencia de público a sus convocatorias y su amplia repercusión en medios de comunicación han hecho estallar los ánimos en la caverna tauricida. Con el rechazo creciente de las nuevas generaciones y el continuo goteo de supresión de subvenciones, la tauromaquia ve peligrar su continuidad, y Capital Animal está teniendo el honor de ser señalada como responsable del más reciente empujón hacia el abismo.

Mientras miles de personas siguen visitando la exposición ‘Animalista. Representación, violencias y respuestas’ en La Casa Encendida y Capital Animal proporciona argumentos a quienes creen y sienten que un mundo mejor para todos es posible, el diario ABC ha traspasado todas las barreras y nos acusa directa y abiertamente de cometer un acto de vandalismo.

Pues no. No tenemos nada que ver con ese hecho, ni con otros similares ocurridos en el pasado, cuando Capital Animal aún no existía. No sabemos de dónde salió esa pintura roja ni quién la arrojó sobre la estatua de José Cubero. Para nosotras, por cierto, el rojo más doloroso que tiñe Las Ventas a día de hoy sigue siendo el de los toros asesinados cada tarde en honor a un Isidro que amaba a los animales y al que declararon santo. Ese rojo no es pintura. Es sangre. Y sigue estando fresca cada tarde de feria en la plaza. Y ustedes gozan mientras sale a borbotones del cuerpo del toro y mientras la vomita por la boca y mientras le chorrea por la nariz, y cuando el toro cae muerto sobre ella y es arrastrado dejando un reguero de miseria humana. Esa sangre no les duele, no les ofende. La celebran.

La información publicada por ABC es falsa. Y nos repugna doblemente por ser una prueba más de un periodismo que no es tal. Que no busca la verdad ni se sustenta en datos veraces. Que solo busca criminalizar a quienes defienden un mundo en el que la tortura por diversión no tiene cabida y para ello recurre a la falsedad, al ataque contra el honor y la dignidad de la asociación Capital Animal y de las personas que la formamos.

Por ello hemos exigido una rectificación pública y emprenderemos las acciones legales que consideremos oportunas.

“Nuevo acto vandálico del Reich Animalista. Los salvajes de Capital Animal han atacado el monumento a José Cubero ‘Yiyo' que se encuentra en los aledaños de la Monumental de las Ventas”.

Con esa información de ABC, las personas que formamos Capital Animal nos enterábamos de que la referida estatua había sido pintada y de que, además, supuestamente, habíamos sido nosotros. Lo llaman periodismo, pero es difamación.