Hoy os traemos el análisis de unas zapatillas todoterreno ligeras, publicitadas, como la mayoría de la serie “Pulse”, para “actividades de ritmo rápido, incluso en terrenos irregulares”, y a las cuales hemos puesto a prueba en trepadas fáciles, bastantes aproximaciones y unas cuantas ferratas... Os adelantamos que nos parecen, definitivamente, unas prácticas zapatillas de aproximación y trekking fantásticas.
Nacida a los pies de Montebelluna (Italia), el “Silicon Valley” del calzado deportivo, Garmont fabrica calzado de alpinismo, montañismo y trekking desde hace décadas, concretamente 1964. Y 60 años de experiencia confeccionando productos para los pies es un gran bagaje como para que no fallen en las zapatillas que ponemos hoy a prueba.
El terreno de juego y actividades en los que hemos realizado las pruebas han sido, principalmente, el Pirineo y el Prepirineo aragonés, en algún recorrido por montaña, aproximaciones y descensos a vías de escalada, así como alguna escalada fácil (III/IV+) en conglomerado y caliza, algún trote y un par de ferratas. Las mayoría de las actividades se han realizado en días calurosos, aunque algún día ha resultado fresco corriendo de noche.
Soy reticente a la incorporación de membranas impermeables-transpirables en el calzado ligero para monte y correr, ya que en cuanto nos salimos de terreno mojado y/o zonas muy húmedas, las pegas son superiores a los pros en tiempo cálido. Con esta zapatilla, usada durante los meses de abril y mayo con frecuencia, en los que cuando no ha llovido el suelo estaba lleno de charcos o durante las aproximaciones te mojaban los pies con la humedad de la hierba, el resultado ha sido satisfactorio con su membrana G-DRY, aunque con tiempo más caluroso, las guardaría hasta la vuelta del fresco. Impermeabilidad buena, transpiración correcta.
Horma ancha, empeine alto
Es un tema recurrente, pero de nuevo, y como de costumbre, para la gente que somos de pies complicados, con estas dos palabras mágicas acabo de alegrarles el día.
Curiosamente, las marcas italianas suelen fabricar horma estrecha, pero esta zapatilla, con un pie ancho y extremadamente cabo (altísimo de empeine), ha resultado muy cómoda, sin terminar al final del día con los típicos dolores que te produce el calzado normal. En fin, un placer ponernos la zapatilla y un descanso brutal cuando nos las quitamos sin dolores. El ajuste, con el sistema de lazado muy ancho, es bastante preciso, aunque sin llegar a ajustar como una zapatilla técnica de aproximación.
Construcción
Confeccionada con una mezcla de materiales sintéticos reciclados, en una perfecta combinación de los tejidos empleados y un lazado bastante preciso y, sobre todo cómodo. Su membrana, como hemos dicho, nos garantiza los pies secos durante mucho tiempo.
La parte superior está confeccionada con un tejido sintético sin costuras realizada con PET reciclado. La apuesta de Garmont por la sostenibilidad en sus productos.
Esa construcción, en conjunto con la lengüeta solidaria al cuerpo, para que no haya puntos débiles en la estanqueidad de la zapatilla, nos da como resultado el calzado que buscamos para ir rápidos, ligeros y con los pies secos en nuestras escapadas por el medio natural. Algo que, complementado con un sistema de lazado rápido con tanka que reparte la presión de forma uniforme, da como resultado un conjunto muy bueno en lo que a ajuste se refiere.
El lazado, sistema Fast-Lace, parte de la parte media de la zapatilla sin llegar a apretar en la parte más ancha del pie. Es un cordón fino, que a través de varios ojales y cintas, se cierra en la parte superior por medio de una cómoda tanka. La “no lazada” se guarda en un elástico que evita que nos moleste o enganche el sobrante.
La entresuela, de origen biológico de EVA, y realmente cómoda, es extraída de la caña de azúcar. Buscaban una mayor amortiguación y capacidad de respuesta, y la han encontrado de forma efectiva en terreno abrupto y en las bajadas con peso. Recordamos que se ha probado trotando, y no solo no ha resultado cómoda para su concepto, sino que en distancias cortas (6-8 kilómetros) y desniveles intensos, nos dio buena impresión.
La puntera está reforzada con una protección plástica, y la goma de la suela sube hasta muy alto.
Dispone también de un tirador en la parte trasera para facilitarnos el calzado de la zapatilla. Aparte de ese detalle podremos colgarlas de un mosquetón al arnés para escalar si así lo deseamos
La suela
Calzada con la suela propia GTF™ Magnet de Garmont®, nos ofrece como puntos fuertes amortiguación y tracción. Damos fe. Nos hemos encontrado muy cómodos en todo momento sobre terreno técnico con las 9.81 Pulse WP.
Con un taqueo fuerte, bastante denso, damos fe que la adherencia en seco es muy buena. En mojado es realmente efectiva.
Es bastante flexible, y la hemos sentido incluso precisa, teniendo buen “grip”, y pudiendo llevarla tanto como zapatilla de aproximación de escalada, como si así se desea en terreno asequible tipo cresta o trepadas de hasta IIIº con la garantía de que hasta en mojado no perderemos pie fácilmente.
En el apartado de la “estabilidad”, como la mayoría de zapatillas de tobillo bajo, hay que prestar atención en casos de tobillos inestables.
Para finalizar la parte técnica, remarcar que, con un peso en báscula de 400 gramos para un número 44 EU, nos ha parecido un peso muy correcto para zapatillas con membrana.