Los últimos rescates elevan a más de 800 los migrantes que han pasado la noche de este lunes en el campamento instalado en el muelle de Arguineguín, en el suroeste de Gran Canaria, la cifra más alta alcanzada desde que se instalara hace más de un mes ante la falta de centros para su acogida. En el precario campamento, conformado por varias carpas extendidas en el mismo puerto, los rescatados duermen sobre el suelo a la espera de sus resultados de las pruebas PCR y una plaza en otro lugar donde ser alojados.
Según han informado este lunes fuentes de la Delegación del Gobierno de Canarias, el Gobierno de España “sigue trabajando” para derivar lo antes posible a los inmigrantes a centros adecuados para su atención.
No obstante, han señalado que debido a la pandemia de coronavirus para su traslado es preciso obtener el resultados de las pruebas de PCR que se les practica a su llegada a las islas para descartar que tengan la COVID-19.
La continua llegada de inmigrantes en pateras, cayucos o lanchas neumáticas en las dos últimas semanas ha vuelto a saturar el campamento atendido por personal de Cruz Roja en el mismo muelle de Arguineguín, situado en el municipio turístico de Mogán y base de embarcaciones de Salvamento Marítimo, que se encarga de su rescate y los traslada a tierra.
En lo que va de lunes, se eleva a más de 300 el balance provisional de inmigrantes llegados a las islas, pero durante la pasada semana 1.533 migrantes africanos llegaron a sus costas en 52 pateras, cayucos y lanchas neumáticas, y la mayoría de ellos, fueron trasladados al muelle de Arguineguín.
Canarias dispone de 3.400 plazas para la acogida de inmigrantes y todas están cubiertas, según los datos facilitados por la Delegación del Gobierno.