El aumento de personas que llegan por vía marítima a Canarias desde el continente africano en el último año ha venido acompañado de bulos que criminalizan a la población migrante. De “vacaciones con todo incluido en un hotel”, “culpables” del ascenso de positivos de COVID-19 en las Islas, beneficiarios de ayudas públicas “nada más llegar a España” o supuestos buques nodriza que despliegan “decenas de cayucos” que llegan a las Islas “en perfectas condiciones”. Estas son algunas de las mentiras que se han difundido a través de las redes sociales y, en algunos casos, hasta en declaraciones de políticos en el Congreso de los Diputados. Desmontamos con datos los cinco tópicos más frecuentes vinculados a la inmigración en el Archipiélago.
Los bulos racistas se han intensificado durante la pandemia, responsabilizando a las personas que llegan en patera a las Islas del aumento de positivos de COVID-19 que sufre el Archipiélago en la actualidad.Según los últimos datos publicados por la Consejería de Sanidad sobre los brotes, de los 168 activos solo tres se corresponden con migrantes que han llegado en patera. Uno de ellos con 12 casos en Fuerteventura, otro con tres en Gran Canaria y un tercero con 13 positivos en Lanzarote. Otro brote relacionado con la inmigración está localizado en la Casa del Marino, un centro de acogida gestionado por Cruz Roja donde al menos 37 personas han dado positivo en el virus. Canarias Ahora ha preguntado a la Consejería de Sanidad cuántos positivos se corresponden con personas llegadas por vía marítima a Canarias, pero no ha sido posible conocer la cifra. Un porcentaje reciente publicado el 31 de agosto señalaba que el 91% de los inmigrantes bajo custodia policial en Gran Canaria había dado negativo en COVID-19 en la PCR.
Formaciones políticas como el Partido Popular también han reproducido esta idea en intervenciones en el Parlamento de Canarias. Es el caso de la diputada autonómica y alcaldesa de Arrecife Astrid Pérez, que habló en una comisión parlamentaria de personas que llegan en patera “y cuando llega la Guardia Civil ya han huido”. El consejero de Seguridad, Julio Pérez, respondió que las personas que tocan tierra en embarcaciones no detectadas por el SIVE son localizadas después por las autoridades y cumplen el mismo protocolo que las que son identificadas por los radares en el mar. “No hay nadie en Canarias que haya sido contagiado de COVID-19 por un migrante que llegue en patera. Tampoco hay ningún inmigrante positivo en la enfermedad escondiéndose de la Guardia Civil en una cueva o en una carretera”, defendió. El pasado mes de junio la Secretaría de Estado de Migraciones amplió el protocolo de atención a migrantes durante la pandemia, estableciendo que se realizará un triaje sanitario, se harán pruebas a todas las personas que lleguen y, además, deben cumplir 14 días de cuarentena obligatoria
La decisión de la Delegación del Gobierno en Canarias de realojar en complejos extrahoteleros vacíos a unas 300 personas (160 que llevaban más de cinco noches durmiendo al raso y sin dichas en el muelle de Arguineguín y 135 que estaban en el terrero de lucha de Arinaga) fue criticada por políticos locales, patronales y también por distintos perfiles en redes sociales. En estas mismas plataformas se difundió un vídeo de personas negras en una piscina, asegurando que se trataba de este grupo que había sido derivado a complejos turísticos de la Isla. El Parque acuático Lago Taurito desmintió de inmediato los rumores, informando de que las personas que aparecen en el vídeo no son migrantes en plazas de acogida, sino “clientes como el resto de usuarios”. Paradiste Hotels & Resorts, propietaria del establecimiento anterior, también se pronunció al respecto, explicando que la compañía no se había acogido a la oferta del Gobierno de Canarias para el alojo de inmigrantes. Por su parte, los complejos que están alojando a migrantes tienen las zonas comunes cerradas como medida de prevención ante la COVID-19.
También en Fuerteventura se ha optado por trasladar a un hotel de Corralejo a 43 migrantes que estaban en un albergue de Misión Cristiana Moderna. La patronal hotelera de la Isla considera una “aberración” alojar migrantes en hoteles, alegando que es una “auténtica vergüenza” que el sector empresarial sea el que “resuelva la papeleta a un Gobierno que ha abandonado a Canarias en esta materia”. La alcaldesa de San Bartolomé de Tirajana, Concepción Narváez, también declaró que los complejos extrahoteleros no eran “lugares idóneos para alojara estas personas”. Tal y como publicó la SER, el alojamiento de migrantes en el marco del sistema de acogida humanitaria en estos establecimientos en condiciones dignas ha permitido sacar a 45 personas del ERTE y reactivar a 30 empresas vinculadas a estos complejos como las encargadas con el suministro de electricidad y el mantenimiento.
La diputada de Coalición Canaria en el Congreso de los Diputados, Ana Oramas, aseguró el pasado 30 de julio que buques nodriza despliegan “decenas de cayucos que llegan a Canarias en perfectas condiciones”, sin aportar datos ni pruebas. Ese mismo día, el Ministerio del Interior afirmó que “no existe constancia de la utilización” de este tipo de barcos, y que además se trata de una ruta en la que se monitorizan las llegadas y donde la actividad de prevención también se produce en salida, “tanto por la coordinación con los países africanos como por los equipos conjuntos de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad”.
Los migrantes llegados en patera a Canarias no reciben “nada más llegar” ayudas económicas, como se asegura en distintos mensajes viralizados en redes sociales. Un ejemplo de ello es el Ingreso Mínimo Vital, que exige entre sus requisitos tener la nacionalidad, más de 23 años y “residencia legal y efectiva” en España de forma ininterrumpida durante al menos el año anterior a presentar la solicitud. En el caso de la Prestación Canaria de Inserción, otro requisito es estar empadronado con una antelación mínima de seis meses a la fecha de la solicitud en cualquier municipio de la comunidad autónoma y con documentos que justifiquen debidamente el acuerdo de empadronamiento. La primera asistencia que reciben la da Cruz Roja y consiste en ropa y comida.
En los últimos meses han circulado a través de WhatsApp imágenes de centenares de embarcaciones acumuladas en un puerto, asegurando que se trata de cayucos en muelles ubicados en Mauritania o Argelia esperando para partir a Canarias por “el efecto llamada”. Maldita.es ya desmintió que estas fotografías estuvieran vinculadas al fenómeno migratorio, explicando que se trata de fotos de barcos de pesca e Mauritania, en 2019.
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