LONDRES, 19 (EP/Reuters)
El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, confesó este lunes que la ciudad, encargada de organizar los Juegos Olímpicos de 2016, todavía tiene que resolver sus problemas de seguridad, acrecentados tras un fin de semana lleno de violencia y que ha dejado un balance de 12 muertos, dos de ellos policías, en una redada contra el narcotráfico en una favela.
“Nunca hemos escondido nuestros problemas durante el proceso de candidatura. Siempre se los dijimos a la gente y todavía no estamos enfrentando a los problemas. Tenemos aún mucho que hacer, un largo camino que recorrer y lo que ha sucedido este fin de semana lo demuestra”, señaló Paes durante su presencia en la 'Cumbre de la Industria Global Deportiva', que se celebra en Londres.
El tema de la seguridad en las calles de la ciudad brasileña ha sido uno de los puntos negativos para sacar adelante el proyecto olímpico y el primer edil se muestra “seguro” que en 2016 podrán “desarrollar los Juegos y, afortunadamente, de una forma en el que Río será más pacífica y segura para sus habitantes”.
Paes recalcó que están “preocupados por la seguridad de los ciudadanos y de los visitantes regulares”. “Ese es nuestro desafío, pero las cosas están avanzando”, advirtió.
Además, sobre la celebración del Mundial de Fútbol dos años antes, en 2014, el alcalde de Río reiteró que no habrá problemas y que la cita del balompié demostrará que podrían haber estado “listos dos años antes”.
Por su parte, Craig Reedie, miembro británico del Comité Ejecutivo del Comité Olímpico Internacional (COI), indicó que lamentaba “profundamente” lo sucedido durante el fin de semana en la ciudad brasileña, pero recordó su candidatura realizó “una espléndida campaña” y “un enorme esfuerzo”.