El suizo Alinghi dio el primer paso para conservar la Copa del América de vela, al imponerse en la primera manga de la serie que se disputa al mejor de nueve, al neozelandés Team New Zealandpor 35 segundos sobre la línea de llegada.
Ernesto Bertarelli, dueño del sindicato suizo, y su patrón Ed Baird, sabedores de la importancia psicológica que representa hacerse con el triunfo en la primera regata de la serie, salieron al campo de regatas de Valencia a por todas y dejaron pocas opciones a los neozelandeses, que ofrecieron una gran resistencia, especialmente en la ceñidas.
Esta primera regata ha dejado bien claro que el SUI 100, que este sábado se estrenaba en competición, es rápido en ceñidas, pero con el viento a favor se muestra intratable, rapidísimo, por lo que los neozelandeses tendrán que buscar soluciones de emergencia para tratar de paliar su desventaja en estos tramos.
En ceñida los dos veleros se muestran igual de rápidos y tan solo las decisiones tácticas de sus patrones parecen decantar la iniciativa de un lado u otro.
La salida fue muy apretada, sin un ganador claro, pues fue el Team New Zealand el que cruzó la línea de salida primero por un segundo escaso, unos pocos centímetros que lo colocaban momentáneamente por delante de su rival.
Con los dos barcos amurados a estribor se inició la primera ceñida del recorrido con una ligera ventaja para los neozelandeses, que la perdieron tras la primera virada. Ed Baird, caña del Alinghi logró sacar algo más de velocidad a su barco que Dean Barker al suyo, por lo que poco a poco los suizos se fueron distanciando de su rival, más después de cada virada intentada por los neozelandeses para recuperar la iniciativa.
El paso por la baliza de barlovento se produjo con el Alinghi primero con 13 segundos de ventaja sobre el neozelandés. En la siguiente empopada el suizo no solo se mantuvo por delante, sino que poco a poco fue poniendo agua de por medio respecto a su rival, lo que obligó a Baker a buscar más presión de viento en otras zonas del campo de regatas.
El segundo paso por baliza se pudo comprobar que el Alinghi se mostraba muy firme como líder. Los 20 segundos, algo más de 110 metros, que sacó de ventaja el velero europeo al australiano, parecían ya decantar esta primera manga del lado del suizo.
En la segunda ceñida el Team New Zealand logró, sin embargo, recortar distancias sustancialmente, lo que obligó a su rival a virar para cubrirlo y marcarlo y, de ese modo, evitar sorpresas desagradables.
La consiguiente guerra de viradas dio como resultado que el equipo de Nueva Zelanda se acercara hasta colocarse muy cerca de la popa del barco suizo. Baird, pese a todo, no se descolocó, continuó marcando a su rival y poco a poco empujarlo hacia la layline, línea imaginaria que delimita el campo de regatas, lo que llevó a los neozelandeses a estar peor situados para doblar la baliza.
El Alinghi pasó la boya con 14 segundos de ventaja sobre Team New Zealand, por lo que la última empopada se presentó para el equipo defensor con una ventaja lo suficientemente amplia como para encarar el final de la prueba con cierta tranquilidad, dada la gran velocidad de su barco en este rumbo.
Al final del defensor se apuntó el primer punto de la serie con 35 segundos en la línea de llegada sobre los neozelandeses, que algo tendrán que inventar para anular la diferencia de velocidad entre su barco y el suizo, especialmente en las empopadas.