El Lagun Aro Bilbao Basket le ha sacado el partido que esperaba al mes de marzo, un tramo del calendario que le deparaba cuatro encuentros en su cancha de La Casilla y con el que quería poner tierra de por medio con respecto a los puestos de descenso.
Una vez disputadas las cinco jornadas que el técnico del conjunto vasco, Txus Vidorreta, englobaba en el mes de marzo, aunque el partido de la última de ellas lo jugó este domingo, 1 de abril, las cuentas son más o menos las que esperaba el club bilbaíno.
Las tres victorias obtenidas le han permitido auparse otras tantas posiciones en la tabla clasificatoria, en la que ha ascendido de la décimo quinta plaza que ocupaba a finales de febrero a la duodécimo en la que se encuentra ahora.
Con esos tres triunfos se ha alejado en uno más de la zona de descenso de lo que estaba entonces. Si tras la jornada 22, tenía el descenso a dos victorias con doce encuentros por disputarse, después de la 27, a siete del término de la liga regular, está a tres.
Pero, además, ha logrado involucrar en la pelea por la permanencia a tres equipos que tenía por delante, uno a una victoria, el Etosa Alicante, y dos a dos, el CB Granada y el Polaris World Murcia.
Precisamente a estos dos últimos ha sido a dos de los rivales que ha ganado en el mes de marzo. A ambos les ha superado también en el diferencial de puntos particular.
Al Granada repitiendo el triunfo que ya había logrado en la primera vuelta en cancha nazarí y al Murcia remontándole con una canasta de Javi Salgado a menos de dos segundos para la bocina los nueve puntos que le había sacado el Polaris World en la ida del campeonato.
El tercer equipo al que se ha impuesto en el último mes, el primero por orden cronológico, fue el Grupo Capitol Valladolid, un conjunto al alza que ha conseguido salir de unas posiciones, las que llevan a la LEB, a las que parecía condenado durante gran parte de la temporada.
Aunque el bagaje es positivo para Txus Vidorreta y sus jugadores, al Lagun Aro le faltó un triunfo o dos para redondear un mes de marzo perfecto o casi perfecto.
Pero el intenso DKV Joventut fue demasiado rival para el equipo bilbaíno incluso en La Casilla y en el Telefónica Arena le faltó completar la remontada que rozó en varias ocasiones ante un MMT Estudiantes al que dio demasiada ventaja al inicio del choque.
A pesar de esas dos derrotas, no obstante, el conjunto bilbaíno goza de cierta tranquilidad en la tabla para encarar la última parte de la temporada, siete partidos que afronta con ya once triunfos conseguidos y tres de ventaja sobre el descenso.