Días de ilusión, esperanza y sueños. Tan solo le ha bastado a la Unión Deportiva Las Palmas encadenar dos victorias seguidas y ofrecer una imagen diferente ante el Murcia para dar un giro de 180 grados a la mentalidad de la afición de cara a las aspiraciones del club para la temporada. Una afición a la que no le hace falta mucho para volcarse con los suyos y que, a pesar de haberle tocado sufrir durante tantos años, siempre está ahí, en mayor o menor medida, para tocar cotas de asistencia al Gran Canaria impropias de la categoría a la que pertenece el club.
A catorce partidos vista del final de temporada y con ocho puntos que remontar para conseguir los soñados puestos de ascenso, el club amarillo intentará responder de la mejor forma al respetable que tanta confianza deposita en los suyos: una victoria ante todo un coloso, el segundo clasificado y mejor en forma de la categoría, el Real Club Celta de Vigo.
Los gallegos llegan a la isla tras una impresionante racha de trece partidos sin perder -con siente victorias consecutivas- y con el encuentro ante los amarillos como una final, según palabras de Paco Herrera, técnico de los gallegos. Una final que les permitiría seguir manteniendo o incluso aumentar el colchón de siete puntos que les afianzan en el segundo puesto que ofrece un boleto con destino directo a la categoría de oro del fútbol español. Un encuentro de altura entre el mejor visitante y uno de los mejores en su feudo de la categoría, entre que más marca fuera y uno de los que menos encaja en casa. En definitiva, un duelo en el que, de salir victoriosa la Unión Deportiva, saldría muy reforzada en sus aspiraciones de llegar más allá de la meta marcada por el club desde principio de temporada.
Para lograr la gesta, Juan Manuel Rodríguez ha tenido que volver a rehacer su línea defensiva debido a las ausencias de Juanpe, por sanción, y Laguardia, aún convaleciente de su lesión en el tobillo. También daba el susto David González, activo de una importancia ineludible en la creación amarilla, pero finalmente podrá defender la camiseta amarilla al recuperarse a tiempo de sus molestias en el tendón de Aquiles.
Con todo ello, Juan Manuel Rodríguez alineará de inicio presumiblemente a: Barbosa bajo palos; Pignol, David García, Herner y Ruymán en el muro defensivo; Javi Castellano y David González en el doble pivote; Vitolo, Viera y Momo en el motor ofensivo y Javi Guerrero como hombre más adelantado.
“Nos enfrentamos, en mi opinión, al mejor equipo de la categoría”. Juan Carlos Socorro, quien sustituía a Juan Manuel Rodríguez en la habitual rueda de prensa debido a una gastroenteritis del de las Alcaravaneras, no pasaba por alto el poderío de los vigueses. Sin embargo, asegura que el “partido está más que preparado” y asevera que la Unión Deportiva “sabe como contrarrestar las numerosas armas del cuadro albiceleste”.
“La afición es sabia, sabe que les necesitamos”, añadía el segundo mandatario técnico del club, quien confía en que la afición amarilla no falle a los insulares y se registre una entrada acorde con la importancia de la cita. Un partido que vale más de tres puntos, una oportunidad clara de dar un golpe encima de la mesa y de ratificar que el buen momento en el que se encuentra la Unión Deportiva no es fruto de la casualidad.