La victoria, este martes, tiene premio: encarrillar la clasificación para los cuartos de final de la Eurocup. Con el objetivo bien definido, entonces, el Gran Canaria 2014 se presenta en la República Checa con el reto de dar un paso al frente en una cita ante el CEZ Nymburk que, tras las tres primeras jornadas de competición del Grupo L, se presenta como cardinal.
El Granca es segundo en la clasificación, tras derrotar en el Centro Insular al Turk Telekom (73-65) y al propio CEZ Nymburk (69-54). Con el equipo turco fuera de combate (con un balance de tres derrotas en tres partidos) y el Estrella Roja lanzado hacia la siguiente fase (con tres victorias en tres encuentros), el conjunto claretiano y su adversario checo se juegan, en el envite, tres cuartas partes de la segunda plaza del grupo, puesto que también da acceso a la próxima ronda.
Incluso una derrota (por una desventaja inferior a los 15 puntos) podría acercar al Gran Canaria 2014 a los cuartos de final de la Eurocup, aunque en caso de caer ante el CEZ Nymburk, el margen de error del equipo que dirige Pedro Martínez se reduciría a la mínima expresión de cara a las dos últimas jornadas, en las que tendrá que viajar a Ankara para medirse al Turk Telekom y recibir al Estrella Roja en el Centro Insular.
No podrá contar Pedro Martínez en la República Checa con los servicios de Dan Kickert, baja que reduce la rotación interior del cuadro claretiano a sólo tres jugadores: James Augustine, Will McDonald y Taph Savané, que para aumentar la dificultad del encuentro también presenta molestias en un tobillo. El resto de la plantilla, tras gozar de varios días de descanso (por la disputa de la fase final de la Copa del Rey), está a disposición del técnico catalán.
El partido ante el CEZ Nymburk es, además, la primera cita oficial que la plantilla del Granca encara tras protagonizar, el pasado viernes, un paro de protesta por el retraso en el cobro de sus nóminas y por la falta de comunicación, sobre la situación económica de la entidad, por parte del club.