Los azulgranas perdonaron infinidad de ocasiones de gol, en un día donde la pelota no quería entrar. Alexis y Cesc dispusieron de las mejores oportunidades, pero no acertaron con la meta de Cech. Los ingleses hicieron su partido, con una gran defensa y aprovechando la velocidad a la contra y la calidad de Drogba.
El Chelsea entregó el cuero a los azulgranas desde el primer minuto, encomendándose a las arrancadas de Drogba a la contra, pero con una fuerte presión que dificultaba el inicio de la jugada del Barça.
El jugador de Costa de Marfil dispuso de alguna oportunidad para plantarse sólo ante Valdés, pero apareció Puyol para desbaratar el peligro. Alexis respondió para los de Guardiola de inmediato, estrellando en el larguero una gran asistencia de Iniesta.
Poco a poco entraron en juego los jugones del Barça, desembocando todas las jugadas una y otra vez en los dominios de Cech, donde Cesc dispuso de una ocasión inmejorable para lograr el primero.
El conjunto de Guardiola continuó marcando el ritmo con un dominio absoluto del juego, teniendo a Valdés como un mero espectador. Al borde del descanso, Cesc volvió a tener la mejor ocasión de los suyos en un mano a mano con el portero que sacó Ashley Cole, tras una contra bien llevada por Messi.
Pero en el último suspiro de la primera parte, un balón que perdió Messi en el centro del campo desembocó en una contra mortal del Chelsea que Ramires cedió a Drogba para anotar en la primera oportunidad de los blues.
Con los ingleses encerrados en su área, cerrando todos los espacios para crear un pase, Adriano se atrevió a ir hacia delante y, tras sortear a un par de rivales lanzó un derechazo ajustado al palo que detuvo Peter Cech con una gran estirada. El Barça continuó perdonando el gol, en otra oportunidad de Alexis, que remató fuera por poco.
El Barça se estrellaba una y otra vez contra la defensa del Chelsea, que era un auténtico muro inexpugnable, cediendo muy pocas opciones. Los azulgrana no desistieron de su juego, teniendo varias ocasiones de gol, pero siempre aparecía Cech para salvar a los suyos.
Cuando todo estaba listo, Pedro tuvo una última oportunidad, estrellando el cuero en la base del poste, cuyo rebote envió Thiago a la snubes cuando tenía todo a favor para empatar el partido. Perdono muchas ocasiones durante el partido el conjunto de Guardiola, que ahora encara cuesta arriba la vuelta en el Nou Camp.