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El canto al equilibrio del CD Tenerife

Soriano, celebrando un tanto con sus compañeros

ACAN

Santa Cruz de Tenerife —

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Las cuatro primeras jornadas de la LaLiga Smartbank 21-22 han colocado al CD Tenerife en la zona noble de la clasificación, una ventajosa cuarta plaza basada en la solidez defensiva y su capacidad para definir las victorias en la segunda parte, cuando ya ha madurado a su rival. El análisis del rendimiento del representativo arroja una mayoría de conclusiones positivas, todavía lejos de cualquier proyección a 42 jornadas vista, pero muy importante para consolidar el modelo de juego que pretende Luis Miguel Ramis.

Segundo mejor arranque del siglo. Después del cuarteto inicial de encuentros de Liga, el CD Tenerife 21-22 es el segundo más efectivo de las dieciocho temporadas que acumula en Segunda División en lo que va de siglo. Solo lo mejora (9 de 12 puntos) el del curso 05-06 que, de la mano de José Antonio Barrios, acumuló tres triunfos (Nàstic, Málaga B y Real Madrid Castilla) y una derrota (Recreativo) en este microciclo competitivo.

Puerta a cero. Salvo en tres de sus participaciones en la Segunda División B (79-80, 81-82 y 13-14), el representativo no fue capaz, desde su acceso a las categorías nacionales en 1953, de acabar imbatido en tres de sus cuatro primeros compromisos y, consecuentemente, de enlazar tres jornadas consecutivas dejando inédita la casilla en goles en contra. De hecho, Juan Soriano acumula ya 293 minutos sin recoger el balón de su puerta desde que le batiera Álex Mula en el Fuenlabrada-CD Tenerife del estreno del curso.

El mejor arranque de Soriano (también). La eficacia estadística de los blanquiazules se personifica, estadísticamente hablando, en Juan Soriano, nuevo titular de la portería tinerfeñista. El futbolista andaluz firma también su mejor inicio como profesional desde su debut con el Sevilla Atlético en la temporada 16-17. Nunca antes había encajado solo un gol en sus cuatro primeras comparecencias ligueras y solo en el curso 18-19 —a la vera del checo Tomas Vaclik, titularísimo en el primer equipo sevillista— se acercó a esta cifra recibiendo dos tantos en los cuatro encuentros en los que lo alinearon Pablo Machín o Joaquín Caparrós en la segunda vuelta de aquella edición de LaLiga Santander.

Tiempo para todos... Fiel a la importancia que otorga al valor del grupo por encima de las individualidades, Luis Miguel Ramis ya ha hecho debutar en este curso a todos los profesionales disponibles, a excepción de Dani Hernández —suplente de Juan Soriano— y Manu Apeh, que por problemas burocráticos se incorporó tarde al trabajo y todavía debe completar trabajo extra para alcanzar el tono físico y competitivo de sus compañeros.

y un eje consolidado. Aunque si algo posee la plantilla blanquiazul es versatilidad y casi una decena de futbolistas que pueden alternar puestos, Ramis ha cimentado la solidez de este Tenerife en un eje que arranca en Juan Soriano y completan Sipcic y Carlos Ruiz en la zaga, Míchel Soriano y Álex Corredera como medios centros y Sam Shashoua como segundo delantero. A los flancos, las variantes de las que dispone el técnico le permiten cuando menos dos jugadores por puesto, un signo del equilibrio que exhibe su equipo en estas primeras semanas de competición.

Dos canteranos debutantes. El inicio notable del CD Tenerife tiene otras notas positivas, entre las que el debut en el fútbol profesional de dos canteranos puede que sea la más llamativa. En la primera fecha lo hizo el delantero Ethyan González —luego intervino también en la segunda y en la cuarta cita— y el sábado pasado se asomó por primera vez con la camiseta del primer equipo el extremo Thierno Barry, relevando en el minuto 87 a Álex Corredera. Junto a ellos, han estado presentes en todas o algunas de las convocatorias de Ramis el portero Víctor y los jugadores de campo Félix Alonso, Jorge Padilla (antes de su cesión al Atlético Levante), Yeremy Socorro o Dylan Perera.

Y un apoyo creciente en el Heliodoro. La Liga 21-22 ha devuelto al público a los estadios de LaLiga SmartBank, aunque todavía con aforo imitado debido a las restricciones sanitarias derivadas de la pandemia por la COVID-19. Incluso así, el ambiente en el Heliodoro Rodríguez López ha ido creciendo: si en la segunda jornada (CD Tenerife-Real Sporting) fueron 5.059 los aficionados blanquiazules presentes en el coliseo capitalino, dos semanas después la cifra llegó hasta 6.940, con un 37% de incremento. El club ya ha sobrepasado los 8.500 abonados mientras mantiene abierta su campaña anual de captación de fieles.

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