El técnico Paco Jémez llegó este martes a Gran Canaria para hacerse cargo de la primera plantilla de la Unión Deportiva Las Palmas y declaró nada más aterrizar en la isla que entrenar a este equipo es su “regalo de Navidad”
“Entrenar a la UD Las Palmas otra vez es mi regalo de Navidad. Esta situación no la veo como un problema, es un reto e intentaremos sacar los puntos necesarios para salvar la categoría”, dijo Jémez.
Paco Jémez será presentado este miércoles a las 11.00 horas en la sala de prensa del Estadio Gran Canaria. Por la tarde, a las 17.00 horas, dirigirá su primera sesión de entrenamiento en el Complejo Deportivo El Hornillo de Telde. A la finalización, la plantilla quedará concentrada en el Hotel AC Gran Canaria hasta el domingo 31 de diciembre.
El nuevo técnico amarillo fue recibido esta tarde en el aeropuerto por el director general, Patricio Viñayo, y por el jefe de producción Rubén Fontes.
Paco Jémez, que ya dirigió a Las Palmas en Segunda, en la temporada 2009-2010, será el cuarto entrenador que se siente esta temporada en el banquillo del equipo grancanario, que en estos momentos es colista de La Liga Santander.
Le precedieron en el cargo Manolo Márquez, que dimitió; Pako Ayestarán, que fue destituido; y Paquito Ortiz, que se ha ocupado transitoriamente del equipo mientras el club decidía si podía fichar al argentino Jorge Almirón, de Lanús, al que RFEF negó el permiso para dirigir a un equipo en España, o apostaba por Jémez.
El técnico grancanario, que acaba de cerrar una etapa en México, donde entrenó al Cruz Azul, contará como colaboradores con Juan Luna Eslava (segundo entrenador y que ya estuvo con él en su anterior etapa en la UD Las Palmas), Julio Luis Muñoz Saldaña (preparador físico) y Jorge Ramírez Fernández (entrenador de porteros).
En los últimos días, Jémez ya ha adelantado con qué idea regresa a Las Palmas: “Hay talento natural, pero el conjunto no se beneficia. Hay que encauzar ese talento. La única manera de hacerlo es con disciplina”, señalaba en una entrevista en “La Provincia”.
El nuevo técnico del equipo remataba ese mensaje con esta advertencia a sus jugadores: “Tenemos que demostrarle a la afición que nos importa lo que está pasando. Si hay alguno que pueda dañar al equipo, conmigo va a tener una vida muy corta”.