Tras 14 jornadas disputadas, la UD Las Palmas tiene 20 puntos y se sitúa en la mitad de la clasificación (décimo), empatado con el Málaga, a diez del descenso y a tres de la UEFA.
Una situación que, teniendo en cuenta el objetivo del club, es muy positiva, ya que ha conseguido la mitad de la barrera de los 40 puntos necesarios de media para mantener la permanencia antes de finalizar la primera vuelta de la temporada, que será el 22 de enero en casa frente al Deportivo de La Coruña, en la jornada 19.
Sin embargo, la tranquilidad con la que los de Setién pueden afrontar las jornadas sin el agobio de luchar por salir del pozo se debe en gran parte a los partidos que ha disputado en el Estadio de Gran Canaria, donde aún no conocen la derrota esta temporada y encadenan once partidos sin perder contando desde la temporada pasada, concretamente desde el 13 de marzo, cuando perdió 1 a 2 ante el Real Madrid.
Y es que fuera de su feudo Las Palmas ha mostrado una imagen que los números ilustran por sí solos. De los siete encuentros disputados como visitante, los amarillos han sumado cinco puntos (de 21 posibles), acumulando sólo una victoria, dos empates y cuatro derrotas.
Algo que sigue la línea de la temporada pasada, cuando Las Palmas sumó 15 puntos como visitante de los 44 que consiguió en total, acumulando cuatro victorias, tres empates y doce derrotas fuera de la Isla.
Esta temporada los amarillos han ido de más a menos. El arranque no pudo ser mejor con la victoria por 2 a 4 conseguida ante el Valencia.
Le siguió el partido en el Sánchez Pizjuán, un encuentro donde los amarillos merecieron algo más que una derrota (2 a 1 para el Sevilla).
En la jornada 5 los de Setién desaparecieron por completo y encajaron la que hasta la fecha ha sido la derrota más abultada esta temporada (4 a 0 ante la Real Sociedad), mostrando una imagen pésima, siendo anulado totalmente por el equipo donostiarra.
Tras conseguir el primer empate de la temporada en casa frente al Real Madrid, la UD viajó a Pamplona para enfrentarse al colista y sumó su segundo empate (2-2) en un partido extraño. Los rojillos se adelantaron al inicio y al final de la primera parte pero, a pesar del dominio de posesión y del encuentro de los amarillos, que gozó de claras ocasiones para dar la vuelta al partido, sólo se consiguió acabar en tablas gracias a un gol de David García en el 91'.
En El Madrigal reaparecieron los fantasmas del Pizjuán y ni el golazo de Boateng pudo evitar sumar otra derrota como visitante (2-1).
Después de dos jornadas seguidas en casa y un parón liguero, los de Setién viajan al Benito Villamarín para disputar su cuarto partido como visitante, 26 días después de su última salida. Y el resultado fue nefasto. Las Palmas realizó un partido pésimo, similar al de Anoeta, ante un Betis que estrenaba entrenador. Víctor Sánchez del Amo acertó en la estrategia planteada y neutralizó en todo momento a los amarillos, ganando por 2 a 0 un encuentro dominado por los locales de principio a fin.
Tras el partido frente al Alavés (1-1), similar al disputado en El Sadar, con un gol tempranero en contra y dominio claro del juego por parte de los isleños, Setién declaraba que no entendía cómo no habían conseguido darle la vuelta al marcador.
La siguiente salida de los amarillos, después de jugar el próximo día 10 frente al Leganés, será en el Vicente Calderón, y será la última vez que los amarillos jugarán en el mítico coliseo del Atlético de Madrid.