Iriome González, centrocampista del CD Tenerife, cree que le ha venido bien parar durante unos días para recuperarse plenamente de unas molestias de tobillo que arrastraba desde hace varias semanas y se ve en condiciones de reaparecer el próximo sábado ante el Elche.
El futbolista canterano, que este martes aguantó sin problemas las casi dos horas que duró la sesión, explicó que ha notado que el dolor ha ido remitiendo y que la decisión de hacer un plan específico de recuperación fue consensuada con el cuerpo técnico y los servicios médicos.
Incidió en que está “bastante mejor” en cuanto al tobillo que tenía lastimado y suspiró por “tener la oportunidad de viajar” a Elche.
Iriome reconoció que vivió con muchos nervios el partido del pasado domingo contra la Ponferradina desde la grada, al punto de que “casi me como el envoltorio del paquete de pipas”.
Esa intranquilidad se vio incrementada por la mala actuación del equipo blanquiazul, que provocó el enfado de los aficionados, reacción que el interior diestro dijo comprender “porque vienen al estadio a ver ganar al equipo”.
Sin embargo, abogó por “no darle más vueltas” a este tropiezo dado que “un partido malo lo tiene cualquiera”, y confió en “aprovechar la buena racha que estamos teniendo fuera de casa para resarcirnos”.
Iriome admitió que ante la Ponferradina pudo haber “algo de relajación” pero garantizó que “esta semana estamos trabajando al doscientos por cien” para sumar los tres puntos que habrá en juego frente al Elche en el Martínez Valero.
Asegurada la recuperación de Iriome, los servicios médicos del CD Tenerife aguardan a la evolución de Suso Santana, quien este martes tampoco se ejercitó por unas molestias en el recto anterior y en la pata de ganso en la pierna izquierda.
También se espera que se repongan a tiempo de sus respectivas molestias Ángel, Juvenal y Héctor, por lo que la única baja segura en estos momentos es la del polaco Tomasz Frankowski, quien continúa al margen.