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Rossi enmudeció Jerez con una superioridad absoluta frente a Pedrosa

El italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) enmudeció a los más de ciento treinta y dos mil espectadores presentes en el circuito de Jerez de la Frontera con la espectacular y contundente derrota que le infligió al español Daniel Pedrosa (Honda RC 212 V) en el Gran Premio de España de MotoGP, en el que evidenció una superioridad total y absoluta frente a todos sus rivales.

Pedrosa le ganó el mano a mano en la vuelta más rápida de entrenamientos por unas milésimas de segundo, pero en carrera la situación varió sensiblemente y no hubo excusas.

Ese mano a mano que protagonizaron prácticamente desde que se apagó la luz roja del semáforo dejó en evidencia la superioridad que hoy por hoy tiene Valentino Rossi frente a todos sus rivales si todo funciona correctamente y hoy fue así.

Con paso firme y desde la segunda vuelta, Valentino Rossi puso en fila india a todos sus rivales, primero Daniel Pedrosa, después Colin Edwards y así sucesivamente, pero ninguno dio ni la más mínima muestra de poder rebatir la autoridad del siete veces campeón del mundo, que se marchó en pos de la primera victoria de la temporada.

El triunfo de Valentino Rossi le sitúa ahora como líder del mundial al acabar el australiano Casey Stoner, vencedor en Qatar, en una discreta quinta plaza, después de pelearse con otro español, Toni Elías (Honda RC 212 V), que protagonizó una gran actuación en Jerez al conseguir el cuarto lugar y defenderse a la perfección de los ataques de Stoner.

El campeonato no ha hecho más que comenzar pero en un circuito que para él reconoce que resulta talismán, el de Jerez de la Frontera, Valentino Rossi demostró que quiere recuperar el título mundial que perdió el pasado año en la última carrera y lo quiere hacer como los grandes campeones, convenciendo.

No hubo excusas ni razonamientos distintos sobre la pista. Salvo la caída del estadounidense John Hopkins (Suzuki GSV RR), que ya se había quedado descolgado del grupo de cabeza cuando sucedió.

Estuvieron todos en la carrera y nadie, ni el propio Daniel Pedrosa, a pesar de intentarlo, pudo plantar cara a Valentino Rossi y aguantar su ritmo para que el italiano no escenificase un pleno en los bolos nada más adjudicarse la victoria, pues el piloto de Urbino llevaba mucho tiempo sin celebrar de forma exótica una victoria y ésta le salió del alma.

En el podio de Jerez de acompañaron Pedrosa y Edwards, que están llamados a ser sus rivales de la temporada, lo mismo que Casey Stoner y Loris Capirossi, pero ambos, por distintos motivos, acabaron defraudando, el primero al no conseguir un buen ritmo de carrera y el segundo por estar pensando en su mujer Ingrid, a punto de dar a luz a su primer hizo y esa acabó siendo demasiada responsabilidad para el piloto italiano.

Lorenzo celebra su triunfo a lo grande

El español Jorge Lorenzo (Aprilia) tuvo que sudar en esta ocasión el mono de cuero para poder adjudicarse la segunda victoria consecutiva de la temporada, esta vez en un marco tan deseado por todos los pilotos como es Jerez de la Frontera, lleno hasta la bandera y, una vez que lo consiguió no dudo en celebrarlo a lo grande.

Sus celebraciones ya empiezan a convertirse en un clásico y para hoy tenía preparada una bandera pirata con el eslogan Lorenzo's Land (Tierra de Lorenzo), y lo cierto es que el joven mallorquín no va nada desacertado en sus aseveraciones.

La carrera fue mucho más disputada de lo previsto, pues Lorenzo salió bien pero antes de concluir el primer giro le había superado el italiano Andrea Dovizioso (Honda), al que luego siguieron también Álvaro Bautista (Aprilia), Héctor Barbera (Aprilia) y el sanmarinense Alex de Angelis (Aprilia), que había salido desde muy atrás pero consiguió enlazar para algo después ser también el primero en quedarse descolgado.

La lucha entre Lorenzo y Barberá tuvo a éste como primera víctima, pues tras superar al campeón se vio nuevamente doblegado y en su intento de mantener el rebufo de su rival acabó por los suelos.

El quinteto de cabeza ya sólo era un trío y en él quien más madurez y superioridad demostró fue el campeón del mundo, que pegó el tirón suficiente como para que sus rivales no pudiesen ya inquietarle. Bautista, en su segunda carrera en el cuarto de litro, también supo mantener a raya a otro campeón como Andrea Dovizioso y ese acabó siendo el orden de entrada en línea de meta.

El último de los españoles de la cilindrada en llegar a meta fue Álex Debón (Aprilia), que lo hizo en quinta posición. Un resultado excelente para el piloto de Castellón, mientras que el resto de españoles de la cilindrada, por uno u otro motivo, acabaron fuera.

Talmacsi brilla en 125 c. c.

Esta vez el húngaro Gabor Talmacsi (Aprilia) no se dejó sorprender y protagonizó la misma jugada exitosa que Héctor Faubel en Qatar, ya que después de marcar el ritmo durante casi toda la carrera de 125 c.c. en Jerez, primero en solitario y luego con el checo Lukas Pesek (Derbi) como compañero de fuga, se vio superado por su rival en la última vuelta.

Talmacsi no quiso arrojar en ningún momento la toalla y esperó paciente a que su oponente cometiese un error, que se produjo en la curva de entrada a meta, en la que se tuvo que cerrar para no dejar huecos al húngaro pero ese comportamiento le obligaba luego a abrir la trazada, que fue cuando el piloto de Aprilia se pegó literalmente a él, ganándole la posición buena y, por el rebufo le acabó ganando en la línea de llegada por escasamente catorce milésimas de segundo.

La victoria de Talmacsi, unida al tercer lugar ocupado por Héctor Faubel (Aprilia), que en ningún momento entró en la guerra por la victoria, permitieron al primero situarse líder de la clasificación provisional del mundial con cuatro puntos de ventaja sobre el piloto de Lliria, quien dio muestras de tener claro que el campeón del mundo de este año será el que más carreras acabe y quizás por ello no quiso arriesgar más de lo preciso.

La categoría de 125 c.c. había tenido un protagonista destacado durante todo el fin de semana, el italiano Mattia Pasini, quien no había podido puntuar en Qatar, pero su Aprilia le jugó una jugarreta en la vuelta de calentamiento al pararse que le obligó a entrar en boxes y salir desde el último lugar.

La salida del transalpino fue espectacular y en la primera vuelta ya se colocó décimo, pero los nervios le jugaron una mala pasada y tras arrollar al británico Bradley Smith (Honda) y caer, intentó continuar, pero no pudo y se tuvo que retirar con un cabreo monumental.