Otro paseo y entrenamiento para Serena Williams, primera cabeza de serie, en el Abierto de Estados Unidos, último torneo de la temporada de Grand Slam, al vencer por 6-0 y 6-0 a la grancanaria Carla Suárez Navarro, vigésima octava favorita.
Williams, que el próximo 26 de septiembre cumplirá 32 años, consiguió por octava vez, quinta consecutiva, llegar a las semifinales del Abierto, y tendrá como rival a la china Na Li, quinta cabeza de serie, que en la sesión matinal derrotó por 6-4, 6-7 (5-7) y 6-2 a la rusa Ekaterina Makarova, vigésima cuarta cabeza de serie.
El partido entre Williams y Suárez Navarro, tercero que disputan entre ambas como profesionales, apenas duró 52 minutos, incluidos los 23 del primer set, y no tuvo más historia que ver como la actual campeona del Abierto se exhibía a base de golpes demoledores que la tenista canaria era incapaz de devolver, en lo que fueron sus primeros cuartos de final en un torneo de Grand Slam.
Suárez Navarro, que celebraba su 25 cumpleaños, no pudo hacerlo con un triunfo, ni con su mejor tenis, pero al menos consiguió llegar por primera vez a los cuartos de final en el Abierto de Estados Unidos, algo que el tenis femenino español no conseguía desde 1998 con Arantxa Sánchez Vicario.
Las estadísticas del partido no dejaron ninguna duda de la abrumadora superioridad de Williams, que colocó 4 aces con su saque y ganó el 74 y 88% de los puntos con el primero y segundo servicio, respectivamente, además de aprovechar 6 de 7 oportunidades de break por ninguna de su rival que tuvo dos.
Williams también logró 20 golpes ganadores y cometió errores no forzados, comparados a los 3 y 12, respectivamente, de Suárez Navarro, que hizo que el partido se convirtiese en menos competitivo de los que se llevan disputados en el último torneo de Grand Slam.
La hermana menor de las Williams también estuvo dominante cuando subió a la red al ganar 12 puntos en 15 oportunidades por 3 de 5 que logró Suárez Navarro, a la que había ganado anteriormente en el Abierto de Australia del 2010 (6-0 y 6-3) y en el de Roma de este año (6-2 y 6-0).
“Las condiciones no han sido las más favorables en el campo y he tenido que hacer un gran esfuerzo porque tampoco he jugado mi mejor tenis”, declaró Williams al concluir el partido. “Estoy feliz de estar en semifinales y que todavía puedo y debo jugar mejor”.
De su duelo con Li, el undécimo entre ambas tenistas, con ventaja de 8-2 para Williams, incluido el triunfo que consiguió en el pasado torneo del Masters 1000 de Cincinnati, la número uno del mundo dijo que sería muy difícil, pero interesante.
“No tengo duda que será un gran partido y espero conseguir la victoria para mantenerme en la competición y disfrutar junto a todos los seguidores que me han apoyado de nuevo”, destacó Williams. “Es algo especial y les doy las gracias”.
Williams, que busca su quinto título del Abierto, ya ha disputado seis finales, incluida la del año pasado que ganó a la bielorrusa Victoria Azarenka, segunda cabeza de serie, que en la sesión matinal logró su pase a los cuartos de final tras vencer por 4-6, 6-3 y 6-4, a la serbia Ana Ivanosevic, exnúmero uno del mundo, y decimotercera favorita, en partido atrasado por la lluvia.
El triunfo permitió a Azarenka, de 24 años, disputar por segunda vez consecutiva los cuartos de final del Abierto, y su rival será la eslovaca Daniela Hantuchova, cuarta finalista en el 2002, que derrotó 6-3, 5-7 y 6-2 a la estadounidense revelación del torneo Alison Riske, que llevó al cuadro principal como invitada.
Mientras que el otro partido de cuartos de final lo protagonizarán mañana, miércoles, las italianas Roberta Vinci, décima favorita, y Flavia Pennetta.