El pabellón Santiago Martín será escenario este viernes, a partir de las 21.00 horas, del primer derbi tinerfeño en la Adecco LEB Oro y que como no podía ser de otra manera ha estado y estará envuelto en un ambiente de gran expectación.
Tenerife Rural y Socas Canarias reeditarán los clásicos de rivalidad insular que en su día protagonizaran el Náutico o el Tenerife Número Uno con el CajaCanarias, entonces en la máxima categoría del baloncesto español, y que como ahora capitalizaron toda la atención cestista de la isla.
Aunque con objetivos de partida diferentes, los blanquiazules pensando en los play offs y los aurinegros en salvar la categoría de forma más o menos holgada, la igualdad no podía ser mayor a estas alturas de la película, pues ambos acumulan cinco victorias y tres derrotas.
Estadísticas en mano, el Tenerife Rural parte con la vitola de favorito por contar con el factor cancha, ya que sólo ha cedido en una ocasión, frente al Alicante, al calor de su público, mientras que el Socas Canarias pescó como visitante una única vez, ante el Breogán en la jornada inaugural.
Sin embargo, en el partido de este viernes decir que el Socas Canarias juega a domicilio es más relativo que nunca, ya que apenas seis kilómetros le separan de su feudo, el Ríos Tejera, y además los aurinegros contarán con una importante representación de su hinchada en las gradas.
Así lo cree el entrenador del Tenerife Rural, Rafa Sanz, quien entiende que el Socas Canarias “puede suplir sus momentos malos” con la ayuda de sus aficionados y en general por la atmósfera especial que rodea este tipo de encuentros.
Rafa Sanz reconoció que ha hecho cálculos y que probablemente habrá más de 4.000 personas en las gradas. Por tanto, advirtió de que “habrá que saber jugar con esa carga de emotividad grande”.
“No hay que volverse locos ni salir a pecho descubierto, ir a por las dos orejas y el rabo desde el principio, sino que hay que hacer la faena poco a poco”, sostuvo.
El técnico blanquiazul asumió la condición de favorito en este derbi inédito y garantizó que “tenemos un estilo y no lo cambiaremos” por mucho que al Socas Canarias le pueda beneficiar un tanteo de altos guarismos.
Rafa Sanz opinó que es difícil pronosticar cómo puede desarrollarse el choque y subrayó que en lo que respecta a su equipo “intentaremos hacer un partido completo en ataque y en defensa”, aspecto éste último en el que aspira a mejorar las prestaciones con respecto a la última actuación en Santiago.
Del rival destacó su velocidad, agilidad y versatilidad de muchos de sus jugadores, como Levi Rost, Jason Detrick y Javi Román, y en general lo bien que penalizan los errores ofensivos ajenos.
Desde la acera canarista, Alejandro Martínez coincidió con su presidente, Félix Hernández, en cuanto a que el Tenerife Rural es el favorito de la misma manera que lo será su equipo en el partido de la segunda vuelta, en el Ríos Tejera.
Tampoco dio mayor importancia al hecho de que el Tenerife haya encadenado dos derrotas consecutivas, ya que tuvo en cuenta el nivel de sus oponentes, Alicante y Rosalía, y opinó que si pierden también mañana “no se encenderá ninguna alarma porque luego quedarán veinticinco partidos”.
Eso sí, el técnico canarista argumentó que en los derbis no se puede hablar de favoritismo aun en el caso de que el Tenerife Rural fuera el primer clasificado y el Socas Canarias el colista, ya que, adujo, “en estos partidos no importan las rachas ni las posiciones”.
Comparó estas citas a los play offs, en los que “todo cambia, las sensaciones, los planteamientos... se juega con más corazón que cabeza”, dijo.
Tanto, que auguró que el equipo que mejor controle el estado emocional y mantenga la cabeza fría en los momentos clave se llevará la victoria.
Alejandro Martínez atribuyó más que nunca la máxima importancia al factor psicológico y consideró que las consignas tácticas serán las mismas, “ceñirnos lo máximo al plan previsto, no perder balones, controlar el rebote defensivo”.
Tal y como juegan los dos equipos, pronosticó un partido de alta anotación aunque por el alto componente emocional de la contienda no barruntó un baloncesto de calidad.
En cuanto a la presencia de un nutrido grupo de seguidores aurinegros en el pabellón dijo tener dudas de si su apoyo “será suficiente” para aprovechar los momentos que el partido les brindará para ganar. “Tendremos que hacer algo de nuestra parte”, concedió.
Sobre el rival, el entrenador del Socas Canarias no se centró en la figura de Antwain Barbour dado que, argumentó, “en esta categoría no hay equipos que dependan de un solo jugador”.
Por el contrario, dijo que le preocupa “todo” del Tenerife, “su juego interior, exterior, sus bases, su entrenador, su afición... son un club sólido”, sintetizó.