La Unión Deportiva Vecindario se dio el sábado su séptima alegría del año con una victoria frente al Real Madrid Castilla (2-1) que, al margen de adecentar su nefasta racha de resultados le permite ayudar a la Unión Deportiva Las Palmas, que pugna con el filial merengue por la consecución de la permanencia en la Segunda división de fútbol.
El cuadro dirigido por Fernando Castro, ya sin alicientes clasificatorios de ningún tipo -concluirá la temporada como último clasificado aunque le resta una mínima opción de dar alcance al Lorca-, ofreció su perfil más pragmático en un encuentro abierto y en el que le tocó sufrir hasta el final para salvaguardar su renta.
Agarrado el equipo grancanario al gran estado de forma del delantero balear Xisco, quien marcó por cuarto jornada consecutiva y, además asistió a Nenad Mirosavljevic en la acción decisiva, brindó una satisfacción a sus seguidores tras un mes y medio marcado por las decepciones.
En el conjunto insular desean tener un cierre de campaña lo menos traumático posible y se han marcado el objetivo de sumar el máximo número de puntos que le quedan por disputar, por lo que encaran su visita al Salamanca con el propósito de alargar su buena racha y lograr el ansiado primer triunfo lejos de su feudo.